Una compleja defensa del federalismo frente a las tendencias mesiánicas

Una de cal…

Las jurisdicciones petroleras que tiene el país, entre ellas La Pampa, concretaron en la semana que se fue otro fuerte gesto político, que por lo que se ve será una de las formas de respuesta a la abusiva avanzada de un gobierno nacional centralista, que ni siquiera disimula el afán de ir por los recursos de las provincias, incluso pasando por encima de la institucionalidad.

El gobernador Sergio Ziliotto participó junto a sus pares de diversas regiones en esa cumbre que planteó una serie de demandas y advertencias al gobierno de Javier Milei, que con contradicciones y paradojas avanza a los apurones, llevándose todo por delante, sin disimular las características de su conformación ideológica pero también dejando en evidencia en ese camino no pocas brutalidades e ignorancias.

Las provincias petroleras, como una semana antes las patagónicas, hicieron tronar por ahora el escarmiento dirigencial, que en algún momento será el del pueblo: alertaron que la avanzada sobre los recursos naturales es inconstitucional, renegaron del posicionamiento autoritario sin escuchar a las partes involucradas, señalaron la necesidad de un respeto al ambiente, exigieron imprescindibles obras de infraestructura y defendieron a capa y espada el rol de las empresas estatales.

El sector petrolero es apenas una de las dimensiones que afectan de modo directo a La Pampa, provincia en la que además se están reduciendo los recursos que ingresan como fondos coparticipables, tal como ha venido informando El Diario.

Otro aspecto que hizo notar el gobierno provincial es que el aumento de los derechos de exportación representaría para la provincia la pérdida de 13 millones de dólares anuales, derivados de la decisión de quien se candidateó prometiendo que antes de aumentar un impuesto era capaz de cortarse un brazo, pero que sin embargo ya en el poder no duda en agravar la carga impositiva, sin necesidad de prótesis.

Aunque en ese punto la oposición amigable puso el grito en el cielo para atender los deseos de las patronales agropecuarias que constituyen su base electoral y son su interés representado, diputados y diputadas alineados en lo que alguna vez fue Juntos por el Cambio navegan en una ambigüedad que al gobierno le cae como anillo al dedo, seguro de que obtendrá los favores de quienes hacen semejante ostentación de duda y se ofrecen para ser seducidos.

Así como diputados y diputadas, senadores y senadoras de Unión por la Patria han dejado muy en claro que se opondrán al DNU y a la Ley Ómnibus, resulta llamativo el relativo misterio en el que el radicalismo y el PRO guardan su posicionamiento, como si estuvieran jugando no sólo a un arreglo con el oficialismo, sino con las expectativas y la paciencia de quienes han sido sus votantes.

Resulta dificultoso para los estados provinciales, pero sobre todo para las poblaciones del llamado "interior", hacerse respetar si algunas de sus representaciones políticas eligen otro camino y en vez de sostener una defensa del federalismo actúan en beneficio sectorial o personal, con oportunismo político y sacando ventajas.

…y una de arena…

Lo que sí está claro es legisladores y legisladoras están bajo la mirada popular y tarde o temprano tendrán que dar argumentaciones de sus actos y manos alzadas: por más que reine la sensación de que "todo pasa", siempre existe la necesidad de explicaciones antes las calles, ante las plazas, ante la historia o incluso ante la Constitución que prevé una respuesta específica para quienes traicionen a la patria.

En ese sentido se vienen abriendo chances, en asambleas, reuniones y redes sociales, de que la dirigencia política pueda entender lo que le pasa a las personas comunes, a los sectores productivos y del trabajo en la provincia, a los espacios que desde hace tiempo militan los derechos humanos, o a las organizaciones de la Cultura y el Arte: diputados y diputadas no tendrán derecho a decir que no sabían, o que nadie les explicó el impacto negativo de una avanzada sin ton ni son.

Hacia el fin de la semana que se fue, el propio oficialismo le dio salida de la Ley Ómnibus a lo que se caía de maduro como decisión insólita: la privatización de YPF es quitada del pliego de pretensiones de La Libertad Avanza, como una de las reformas "concedidas" para que la oposición llamada "dialoguista" alce las manos necesarias para imponer una serie de reformas que modifican el sistema democrático tal como ha sido entendido hasta hoy.

No es el único cambio que el gobierno está dispuesto a introducir para que esas normativas salgan bien paradas del Congreso Nacional, pese a que el oficialismo reniega permanentemente de la palabra "negociar", que es uno de los términos que más se vinculan con el ejercicio democrático en la búsqueda de acuerdos, consensos y proyectos enriquecidos por otras miradas.

La tendencia del oficialismo a un comportamiento totalitario, mechado además con una caracterización mesiánica que se percibe en algunas de sus conductas, es un dato que sólo el tiempo indicará si resulta parte de la columna vertebral de esta gestión, o si es apenas un asunto pintoresco que va a parar a un rincón de cosas poco importantes con el extendido farandulismo y pavoneo en las redes que también son parte del fenómeno "libertario".

Algo de toda esa cultura expuso el propio presidente en el foro de Davos, con muy altas expectativas de que sus palabras y posicionamientos constituyan una suerte de revolución de miradas a nivel internacional, aunque en la práctica y en el corto plazo lo que se observa es más bien cierta reacción de sorpresa, cuando no matizada con la burla y la vergüenza a partir de planteos que tienen algo de bizarros y que incluso parecen derivar hacia el delirio.

Esa postura presidencial a contramano de la agenda política mundial de los últimos años, termina contentándose con las felicitaciones que propaga Elon Musk, pero lejos están de parecer entender las situaciones populares o de enfocarse al menos en el aire de racionalidad que es intención de otros líderes políticos: la idea de dejarse llevar por "las fuerzas del cielo" enseguida vuelve más importante para el poder "libertario" el avance de la obra de los caniles para que aniden los "hijitos de cuatro patas" que son clonaciones de Conan, el asesor desde el más allá.