Salud

¿Cuáles son los mejores alimentos para los riñones?

La alimentación ocupa un papel clave en la salud de nuestros riñones. En concreto, la dieta mediterránea es una buena aliada para prevenir problemas renales y evitar la acumulación de toxinas y desechos en la sangre.

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EL DIARIO digital

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Podríamos decir que los riñones son la depuradora del cuerpo. Filtrar la sangre para eliminar los desechos y el exceso de agua (lo que da lugar a la orina) es su función principal. Quizás de ahí venga lo de "tener los riñones limpios", una expresión mal usada, de acuerdo con Borja Quiroga, secretario de la Sociedad Española de Nefrología (SEN). "Los riñones no se tienen ni limpios ni sucios, lo que hacen es depurar", aclara. 

En este sentido, el especialista acaba con la creencia de que para mantener los riñones sanos es esencial beber mucha agua: "Se trata de un mito. El riñón tiene la capacidad para concentrar y diluir la orina según lo requiera. Es verdad que necesita agua para que funcione, pero es una cantidad mínima". De hecho, Quiroga advierte que si una persona tiene algún problema renal, puede sufrir complicaciones derivadas de beber un exceso de agua, por ejemplo, que esta se acumule en los pulmones o que se hinchen las piernas. 

Más allá de eliminar las sustancias tóxicas de la sangre, estos órganos cumplen con otras tareas en nuestro organismo. "Regulan los niveles de electrolitos y la presión arterial, ayudan a mantener el equilibrio ácido-base en el cuerpo y producen hormonas importantes, como la eritropoyetina, que estimula la producción de glóbulos rojos", detalla María Lara Prohens Rigo, miembro del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas (Cgcodn). 

Así pues, no es poco lo que estos órganos hacen por nosotros. Por eso mismo, detectar a tiempo cualquier problema que se pueda dar en ellos resulta fundamental. Sin embargo, la realidad "es que existe un infradiagnóstico descomunal", lamenta Quiroga. 

¿Qué alimentos favorecen la salud de nuestros riñones?

Para prevenir los problemas renales en lo medida de lo posible, la alimentación ocupa un papel clave. La recomendación de los expertos es seguir, en términos generales, una dieta mediterránea. "No debemos abusar de las proteínas de origen animal y huir de dietas pobres en hidratos de carbono", aconseja Prohens. La nutricionista hace una lista de nueve alimentos que promueven la salud de los riñones, así como las razones de por qué son beneficiosos.  

Arándanos: son ricos en antioxidantes y contienen compuestos que ayudan a reducir la inflamación y mejorar la función renal.

Pimientos rojos: excelente fuente de vitamina C y baja en potasio. Puede facilitar que la presión arterial baje, además de prevenir el desarrollo de enfermedades renales.

Pescado azul: proporciona ácidos grasos omega-3, que tienen propiedades antiinflamatorias.

Ajo: puede ser un buen aliado a la hora de reducir la sal.

Manzana y pera: son frutas bajas en potasio y con un alto contenido en fibra, lo que las convierte en una buena opción también para las personas con enfermedad renal.

Huevo: se trata de una excelente fuente de proteína de alta calidad y puede ser una opción proteica saludable para pacientes renales si se controla la ingesta de proteínas.

Aceite de oliva: contiene grasas saludables y antioxidantes que mejoran la salud cardiovascular, lo que beneficia a los riñones.

Apio: bajo en sodio, permite un equilibrio de líquidos adecuado en el cuerpo.

Quinoa: muy buena fuente de proteína vegetal y una alternativa saludable a las proteínas animales para pacientes renales. 

"Mantener un peso adecuado, practicar ejercicio físico de manera regular y reponer líquidos durante la práctica de este serán puntos clave para la prevención de cálculos renales", añade Prohens. 

Por el contrario, la dietista apunta que se ha visto que en personas con obesidad, hipertensión arterial, gota, diabetes mellitus, síndrome metabólico y osteoporosis tienen más probabilidades de tener cálculos renales. "Como sabemos, son enfermedades directamente relacionadas con seguir una alimentación desequilibrada y poco recomendada. Por tanto, podemos afirmar que dietas ricas en grasas saturadas, azúcares, sal y proteínas animales, así como dietas bajas en calcio y baja ingesta hídrica favorecen la formación de cálculos renales", destaca. 

Qué dieta deben seguir los pacientes con enfermedad renal 

Es importante procurar que los pacientes renales no acumulen de forma excesiva toxinas en estos órganos. La creatinina, la urea, el fósforo o el potasio son algunas de ellas que tienden a hacerlo. "Es esencial que sigan una dieta específica y reciban el tratamiento adecuado para controlar la acumulación de estas sustancias de desecho y reducir la carga sobre los riñones", manifiesta la nutricionista del Cgcodn. Según la experta, "un nutricionista especializado en enfermedad renal puede ser de gran ayuda para diseñar una dieta personalizada que se ajuste a las necesidades de cada paciente". 

Acerca de qué dieta específica debe llevar un paciente renal, esta "consiste básicamente en intentar comer con menos sal porque la enfermedad renal se asocia normalmente a la hipertensión", resalta Quiroga, quien manifiesta también que en estadios muy avanzados de este tipo de patologías, la persona puede acumular potasio en el organismo. Por ello, habría que tratar de disminuirlo. Eso sí, no hay que eliminarlo, puesto que este mineral se encuentra en alimentos muy saludables, como las frutas, verduras o frutos secos. Por último, la ingesta de proteínas tampoco ha de ser muy exagerada. "Salvo que estén desnutridos, a los pacientes con enfermedad renal no se les recomienda cumplir con dietas hiperproteicas", comenta.

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