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EL DIARIO digital
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El Centro Empleados de Comercio (CEC) de Santa Rosa expresó su "profunda preocupación" ante el proyecto de reforma laboral impulsado por el Gobierno Nacional y advirtió que la iniciativa representa "un retroceso histórico en materia de derechos laborales y sociales", con impactos directos sobre las condiciones de vida de los trabajadores. El comunicado lleva la firma del secretario general del gremio, Rodrigo Genoni.
En primer lugar, el sindicato señaló que la reforma "desprotege al trabajador" al introducir nuevas figuras contractuales por fuera del régimen tradicional, lo que habilita vínculos civiles o comerciales sin estabilidad, sin indemnización, sin vacaciones pagas y sin la protección de la Ley de Contrato de Trabajo. En ese esquema, afirmaron, "miles de trabajadores pasarán a negociar solos frente al empleador", sin herramientas jurídicas que equilibren la relación laboral.
El CEC también advirtió un "vaciamiento práctico de los convenios colectivos" debido a la incorporación de sumas no remunerativas, componentes salariales "dinámicos" y la posibilidad de imponer acuerdos individuales por encima de la negociación sectorial. Eso habilitaría sostuvieron que derechos conquistados durante décadas "sean modificados o eliminados unilateralmente".
Otro de los puntos críticos señalados es la creación del banco de horas, que permitiría extender la jornada sin pago de horas extras y compensar luego con francos. Según el gremio, la reforma también habilita al empleador a modificar turnos, días de trabajo e incluso incluir domingos y feriados sin compensación, "subordinando completamente la vida cotidiana del trabajador a las necesidades de la empresa".
Finalmente, la organización mercantil cuestionó el argumento oficial de que los cambios reducirían la litigiosidad laboral. Por el contrario, consideró que las nuevas reglas generarán "mayor conflictividad", al debilitar la protección legal, aumentar la discrecionalidad empresaria y deteriorar la negociación colectiva.
"El Gobierno avanza en una reforma que implica pérdida de derechos, precarización y desamparo para quienes viven de su trabajo", concluyó el CEC.