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EL DIARIO digital
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La desesperación por la falta de trabajo se visibilizó este miércoles en la Municipalidad de Santa Rosa, donde un vecino, Claudio Hoses (44), intentó llevar a cabo una protesta con la intención de encadenarse. La llegada de patrulleros con personal policial evitó que Hoses concretara la medida, pero no acalló su reclamo por una situación económica que, según sus palabras, "no se aguanta más".
Con la garganta anudada y al borde del llanto, Hoses compartió la crudeza de su realidad: "Tengo 44 años y nunca tuve un aporte, ni un recibo en blanco". El drama personal se acentuó al recordar una fecha emotiva: "Hoy mi hijo cumple 18 años. No pude comprarle una torta", expresó, con la voz quebrada.
El rechazo a la ayuda asistencial
Hoses, que vive en la calle Calegaris junto a su pareja y la hija de ella, a quien crio como propia, buscó en la Municipalidad apoyo para un microemprendimiento de venta de empanadas, aprovechando que cuenta con un horno.
Sin embargo, el vecino criticó la respuesta oficial y las formas de asistencia que se le ofrecieron: "Me ofrecen una bolsa y tiene fideos y lentejas. Estoy podrido. También ir al comedor, pero hay 30 kilos de fideos y un pedacito de carne", reclamó, dejando en claro que lo que necesita no es asistencia alimentaria, sino una oportunidad laboral que le dé dignidad y autonomía.
El vecino señaló que, si bien mantuvo una reunión con la viceintendenta Romina Montes de Oca, quien le habría ofrecido una ayuda "por cuatro meses", el intendente Luciano di Nápoli no lo atendió.
Sin antecedentes laborales formales
A pesar de haber trabajado en etapas como la construcción con durlock (un empleo bien remunerado), Hoses afirmó que jamás tuvo un recibo de sueldo en blanco, lo que le impide acceder a créditos o compras en cuotas.
"Lo que necesito es una ayuda para sobrevivir lo que estamos pasando. No me puedo comprar ropa, nada", confesó.
El hombre, que finalmente desistió de su protesta para evitar problemas con la Policía, cuestionó la disparidad en la asignación de empleos: "Siempre viví en Santa Rosa. Y no me ayudan. Sé que hay gente que mató y tiene un trabajo. Están barriendo una plaza y tienen un sueldo. A mí no me dan un trabajo", afirmó. También denunció que le pidieron "meter la casa para hacer política" a cambio de una oportunidad, algo que se negó a hacer.