La Pampa

Otros cinco egresados afectados por la misma maniobra de la empresa "Max Dreams"

Son del Colegio Domingo Sabio. Ya hay quejas por la falta de controles y piden la intervención del Estado. "No nos pueden dejar de rehenes de estos tipos", reclamó un padre.

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EL DIARIO digital

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Otros cinco egresados del Colegio Domingo Savio son víctimas de la misma maniobra con la que la empresa de viajes y turismo "Max Dreams" complicó el viaje al tradicional viaja a Bariloche a un alumno del Colegio Normal: les quieren cobrar 1,5 millones por el atraso de dos cuotas, lo que representa el valor actual que tiene hoy todo el contrato.

El nuevo episodio fue contado a El Diario por un grupo de padres luego de que se publicara el primer caso testigo. En esta ocasión, una familia decidió recurrir con una denuncia ante Defensa del Consumidor.

"Es muy extorsivo lo que hacen, nosotros estamos convencidos de que el Gobierno Provincial, que es el que habilita a estas agencias de viaje, puede hacer algo... no nos pueden dejar de rehenes de estos tipos", se quejó uno de los padres en contacto con este diario.

Y agregó que, en su caso particular, la equivocación en el atraso de una de las cuotas tuvo que ver con la "cuota cero" que impone la empresa. "Mi esposa confundió esa cuota con la cuota uno... nos dimos cuenta en noviembre del año pasado, fuimos hasta la empresa, llamamos a unos teléfonos que nos dieron y recién nos responden a fines del mes pasado", contó.

- ¿Por qué creen que hacen esto?, se le consultó.

- Primero que nada porque saben que no los controlan y que tienen el poder de imponer un contrato. Y yo creo que se demoraron hasta tener la cotización de lo que vale el viaje ahora. Porque ese precio de un millón y medio de pesos es el valor que tiene actualmente todo el contrato hoy en día. No nos dieron opciones de nada. En la oficina que hay acá, hay unos chicos que no tienen ni siquiera computadoras, no saben nada, derivan todo a una consulta telefónica donde nunca atiende nadie.

Como ocurrió con el primer caso dado a conocer por este diario, la empresa desconoce todo lo cancelado en los últimos dos años, desde que se contrató el viaje.

Las bajas del sistema se producen sin notificación ni comunicación alguna, a pesar de que cada caso está logueado con correos electrónicos de la familia y del egresado.

Y caso de que paguen, tampoco les aseguran que el egresado pueda viajar en el micro con el resto de sus compañeros de promoción. 

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