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Un convenio con el CERET permitirá la incorporación de tecnología que mejorará las condiciones. David Macedo, del Movimiento de Trabajadores Excluídos que coordina el organismo, destacó la incidencia favorable del Mercado Municipal.
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EL DIARIO digital
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La firma del convenio con el Centro Regional de Educación Técnica (CERET) de General Pico mejora notablemente las expectativas de la Escuela Hortícola Municipal, que a partir de la incorporación de nueva tecnología intensificará y diversificará su producción. También hay una mirada positiva con el regreso del funcionamiento del Mercado Municipal, que habilita un canal de comercialización interesante para el sector.
Así lo señaló David Macedo, uno de los referentes locales del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), quien se refirió a la marcha del proyecto de producción hortícola que llevan adelante en conjunto con la Municipalidad de Santa Rosa en el predio situado frente al Aeropuerto local.
Aludió a los beneficios que traerá aparejado para ese emprendimiento el reciente convenio de cooperación y asistencia técnica firmado por el intendente Luciano di Nápoli con el CERET.
En referencia al proyecto de la Escuela Hortícola Municipal que coordina el MTE en nuestra ciudad, detalló que el mismo lleva en marcha ya cerca de 9 meses desde su inicio, y que actualmente está integrado por 13 personas que cumplen una jornada laboral de 8 horas diarias, desde las 9 hasta las 17 horas.
En cuanto al convenio firmado con el CERET, se espera que esa entidad aporte periódicamente al proyecto santarroseño nuevos plantines de distintas hortalizas generadas a partir de su plantinero, y en paralelo, también se consiguió que mencionado Centro colabore en el diseño e instalación de 10 macrotúneles para cultivos de huerta, los cuales ya están siendo colocados en el predio de la Escuela Hortícola Municipal para ponerlos en producción lo antes posible.
Macedo sostuvo que el convenio “es una gran herramienta pensando en poder aplicar nuevas tecnologías y prácticas a una actividad milenaria como lo es la horticultura. Lo que se busca con la cooperación del CERET es poder aplicar nuevas tecnologías que faciliten la labor de los compañeros y compañeras que trabajan en el predio y mejoren la producción”.
Destacó que a partir del arribo de los 10 nuevos macrotúneles se espera poder intensificar y diversificar la producción, no solo porque los túneles permiten ampliar la superficie de producción, sino porque además ayudan a proteger de las inclemencias del clima, distintas especies vegetales que naturalmente sólo se desarrollan en determinadas temporadas, mientras que bajo cubierta pueden a veces continuar prosperando.
En cuanto a la variedad de vegetales y hortalizas que se están produciendo en el predio, señaló que en la actualidad se están produciendo muchas especies de hoja como lechuga mantecosa, acelga, lechuga crespa, achicoria, rúcula, zanahoria y perejil, mediante la ayuda de microtúneles protegidos con tela pao pao antihelada. Y mencionó que también hay en producción cultivos de invierno como brócoli, coliflor y repollo.
Macedo se mostró expectante con la vuelta al funcionamiento del Mercado Municipal, tras el provisorio parate en el marco de las restricciones dispuestas por la situación sanitaria de la provincia.
Destacó que el Mercado Municipal ha sido un gran aporte y solución para muchos pequeños productores hortícolas locales y de la región, a los que se les dificultaba el tema de comercializar sus productos. “Creo sinceramente que es un muy buen canal de comercialización, que está muy bien organizado, donde la gente concurre con gran predisposición y siguiendo los protocolos correspondientes”, acentuó.
Hizo hincapié en que a través de su organización, se han efectuado los contactos con otras cooperativas y organizaciones de otras regiones del país y países limítrofes que se dedican a la producción de alimentos agroecológicos, para traer al mercado municipal de nuestra ciudad productos como: un café de gran calidad y a precio popular producido por la organización Campesinos Sin Tierra de Brasil, que se muele en La Plata a través de una agrupación del MTE rural; sumado a la Yerba marca Tamanduá, que es un producto agroecológico sin TAC producido por la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) y el Movimiento Agrario Misionero (MAM), organizaciones de estrecho vínculo con el MTE.
