Estos son los signos de que te faltan proteínas

El cuerpo humano es una compleja máquina de vida muy sensible a los cambios o a la mala alimentación, tanto por abuso como por escasez. El organismo comunica esas alteraciones en forma de síntomas en diferentes aspectos y lanza un mensaje de que algo no funciona en la alimentación. Esto es lo que sucede cuando una persona tiene un déficit de proteínas en su dieta.

Carmen Aragón Valera, vocal del Comité Gestor del Área de nutrición de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), explica el papel capital de las proteínas en nuestra alimentación. "Las proteínas son compuestos químicos formados por aminoácidos que son necesarios para la síntesis de las proteínas endógenas que cumplen diversas funciones vitales", destaca Carmen Aragón.

La especialista de la SEEN también destaca que las proteínas tienen funciones estructurales (formación de estructuras y tejidos), forman hormonas, anticuerpos, enzimas que catalizan procesos metabólicos y transportan moléculas, entre otros cometidos.

Aragón recuerda cuál es el consumo diario de proteínas. "Un adulto promedio precisa alrededor de 0,8 g. por kilo y día", especifica, mientras que pone de manifiesto que estas necesidades se incrementan en niños y adolescente y durante el embarazo y la lactancia. Además, describe que hay grupos de población más propensos a tener déficit de proteínas. "Los ancianos y las personas que padecen enfermedades metabólicas o que tiene una malabsorción o pérdidas renales".

Las señales de alerta del organismo

Cuando el aporte proteico en nuestra dieta no es el adecuado, el cuerpo comienza a emitir señales de alarma. Estos son los signos más importantes según describe la vocal del Comité Gestor del Área de nutrición de la SEEN.

-Debilidad. La deficiencia de proteínas provoca que la persona tenga una sensación de debilidad, además de experimentar una propensión a infecciones y a los síntomas de la enfermedad causante de la falta de proteínas. 

-Aspecto físico. "La desnutrición produce fragilidad a todos los niveles", expone Aragón. En este sentido, un indicador de que algo no va bien con tu alimentación por el déficit proteico es que la piel, el cabello o las uñas no muestran su mejor aspecto. Algunos síntomas son que la piel puede resacarse mucho, que las uñas pierden fortaleza y se rompen con facilidad e incluso se puede experimentar caída del cabello. 

-Pérdida de masa muscular. Hay relación de la falta de proteína con la pérdida de masa muscular. "Las proteínas son esenciales para el mantenimiento y reparación de las fibras

-musculares por lo que la falta de proteínas conduce a sarcopenia (pérdida de masa muscular)", describe Carmen Aragón. 

-Sistema inmunológico. El déficit proteico también afecta al sistema inmunológico. "Al haber menor disponibilidad de aminoácidos la fabricación de anticuerpos y otros componentes del sistema inmunológico es deficitaria", apostilla. 

-Ánimos bajos y poco rendimiento mental. La desnutrición puede producir bajo ánimo y disminuye el rendimiento intelectual, remarca Carmen Aragón.

Fuentes nutricionales para que no falte proteína

La vocal del Comité Gestor del Área de nutrición de la SEEN detalla que la dieta occidental habitual excede las recomendaciones diarias de aporte proteico. "En ausencia de patología y con una dieta convencional, variada y que incluya todo tipo de alimentos, es imposible tener deficiencia de proteínas", sentencia la especialista de la SEEN.

Carmen Aragón también recuerda que las personas que excluyen alimentos de su dieta (veganos, vegetarianos y similares) deben prestar atención a sus fuentes proteicas para garantizar el aporte de aminoácidos esenciales no sintetizables en el organismo. Esto se consigue por ejemplo combinando alubias con arroz.