Denuncian una "estafa" con la venta de terrenos en el Nuevo Salitral

Un grupo de familias del barrio Nuevo Salitral denunció a a una mujer, una lonko de una comunidad ranquel, Marta Colipi (foto), porque "estafa" a diez familias a la que les cobra alquiler o les vendió la posesión del terreno de supuestas tierras comunitarias dentro de ese asentamiento.

Las familias dejaron de pagar y la mujer los hostiga y amenaza todo el tiempo, según contaron este miércoles por la mañana, durante una conferencia de prensa en el barrio. Acompañados por militantes del Partido Obrero, desde la casa de una de las familias estafadas, sobre la calle Duval, denunciaron públicamente la situación. Las tierras, según averiguaron, son fiscales.

Las familias del Nuevo Salitral levantaron un asentamiento desde hace varios años, en plena crisis habitacional. Algunas enfrentan un pedido de desalojo de un abogado que se presentó en la justicia como propietario de una parcela. Ahora se agrega otro factor de conflicto, que afecta a otras familias humildes.

Diez familias pagaron 2 millones de pesos

El dirigente del PO, Luciano González, denunció que la mujer les viene cobrando a diez familias alquiler o por la venta de los terrenos desde hace dos años. Les prometió entregarles la posesión al final. "Con el correr del tiempo había cosas que no cerraban. Averiguamos y las tierras son fiscales", precisó.

Según González, la mujer ya embolsó alrededor de 2 millones de pesos. Y ahora amenaza con desalojarlos. "Ha habido una enorme estafa con familias a las que no les sobra nada", lamentó.

Una de las mujeres afectadas, María Rodríguez, relató que aceptaron comprar el terreno porque son una familia numerosa y se dedican a la huerta y a vender plantas. Los 5 de cada mes Colipi pasaba a cobrarles la cuota. Integran la misma comunidad ranquel.

"Decidimos no pagarle más hasta que no nos entregue el boleto de compra venta. Nos dijo que nos iba a sacar del proyecto al que accedimos por estar en la comunidad. Se enojó y nos amenazó con desalojarnos. Pero ella ya estaba haciendo las cosas mal si nos cobraba por algo de la comunidad", protestó la mujer.

La vecina estimó que ya pagaron medio millón de pesos. "No nos negamos a pagar. Pero que traiga los papeles si la tierra es verdaderamente de ella. Si son de la comunidad no tendría que usarla para sacarnos plata", dijo.

"Nos dijo que las tierras eran de su abuela, simple, y que el que no pagaba iba a ser palo y a la bolsa", mencionó, respecto al hostigamiento y las amenazas.

Otro de los afectados por la maniobra, Damián Marino, contó que hace dos años entregó una moto a un sobrino de Colipi primero. Pero después la mujer le pidió más dinero. Dijo que le entregó un auto y 100 mil pesos. Pero ella fue con un camión y le "robó" las cosas que había llevado al lugar para levantar una vivienda precaria. "Me amenazó, que iba a venir el sobrino, me dijo que no es ningún tranquilo. Yo le dije que íbamos a defender nuestro lugar", contó.

Utilización de la comunidad

El militante del PO, Luciano González, afirmó que "esta señora está utilizando la comunidad para hacer negocios propios y estafar a la gente".

Aclaró que quieren diferenciar la situación a los reclamos genuinos de comunidades que en la provincia y en otros puntos del país pretenden acceder a la posesión comunitaria de la tierra.

"Acá hay familias de la comunidad que son víctimas, son estafadas. Las autoridades deberían tomar cartas en el asunto para evitar estas práctica que ensucian a las comunidades justamente cuando están siendo atacadas por reclamar tierras que ocupan desde tiempos ancestrales", finalizó.