La Pampa

Del rechazo al aval: el giro de di Nápoli con Clarín

Una parábola política marcada por cambios de alianzas, silencios estratégicos y tensiones internas. En 2018, Luciano di Nápoli se oponía públicamente a la instalación de antenas del Grupo Clarín en Santa Rosa y denunciaba el perjuicio para la cooperativa local. Hoy, impulsa ordenanzas que facilitan el avance del gigante mediático. 

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EL DIARIO digital

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Del rechazo a la legitimación. La historia política del intendente Luciano di Nápoli expone el recorrido de un dirigente que, tras construir su capital político en la gestión, hoy encarna las tensiones de gobernar y asumir los riesgos de sus giros y contradicciones. La relación con la CPE y el desembarco de Clarín en el ojo de la tormenta. ¿Qué cambió en el camino?

En septiembre de 2018, Luciano di Nápoli trabajaba en su estudio jurídico. Tres años antes había dejado la Legislatura pampeana, tras quedar afuera por escaso margen en las elecciones de 2015. Sin embargo, no se alejó de la política: mantuvo un perfil crítico del intendente radical Leandro Altolaguirre y del gobierno nacional de Cambiemos, de Mauricio Macri. Tampoco abandono su aspiración de llegar a la intendencia de Santa Rosa, objetivo que alcanzaría al año siguiente.

En ese contexto, el intendente de la UCR, Leandro Altolaguirre, impulsó una ordenanza que generó fuerte polémica. El 13 de septiembre de 2018, el Concejo Deliberante aprobó —sin debate y con tratamiento exprés— una norma que permitía al Grupo Clarín instalar antenas de telecomunicaciones en espacios públicos. Incluso los concejales justicialistas acompañaron la medida. Ese mismo día, Telecom presentó formalmente un pedido para instalar antenas en cuatro plazas de la ciudad.

La dirigencia de la Cooperativa Popular de Electricidad (CPE) denunció el lobby del multimedio en el Concejo, y se registraron movilizaciones vecinales en rechazo al favoritismo hacia el grupo empresarial, en detrimento de la cooperativa local. En ese marco, di Nápoli —referente de La Cámpora y ya lanzado como precandidato a la intendencia— acompañó alguna de las movilizaciones populares para rechazar la "ordenanza arbitraria" y se pronunció con firmeza.

"El único objetivo de la ordenanza es beneficiar al Grupo Clarín", denunció el 27 de septiembre en sus redes sociales. Advirtió que la medida implicaba "privatizar el espacio público" y perjudicar "los intereses de nuestra cooperativa". 

Además, señaló el vínculo directo entre la norma y la fusión autorizada por el gobierno nacional entre Telecom y Cablevisión. También cuestionó el proceso exprés, sin participación de vecinos ni entidades locales. Cuestionó al intendente Altolaguirre por demostrar "una vez más que está en línea con el presidente Mauricio Macri, que se desentiende del interés de las entidades solidarias".

La presión de la CPE, sumada a las protestas, derivó en una áspera sesión del Concejo con la presencia de dirigentes como Alfredo Carrascal y Oscar Nocetti. Finalmente, el 11 de octubre de 2018, la ordenanza fue derogada: los concejales dieron marcha atrás.

Di Nápoli celebró también en las redes, como un triunfo, la marcha atrás de los concejales.

Una gestión aliada con la cooperativa

Luciano di Nápoli asumió como intendente en diciembre de 2019 y rápido consolidó una alianza estratégica con la CPE. En abril de 2021, en plena pandemia, anunció la creación del Mercado Municipal, instalado en un predio cedido por la cooperativa. En la presentación compartió la mesa con el entonces presidente de la entidad, Alfredo Carrascal.

El 14 de mayo de 2023, di Nápoli logró su reelección tras imponerse al radical Francisco Torroba, convirtiéndose en el segundo intendente en la historia de Santa Rosa en lograr un segundo mandato consecutivo, después de Oscar Jorge.

En su camino a la reelección, el intendente modificó su perfil político: comenzó a marcar diferencias con el gobernador Sergio Ziliotto —a quien criticó por el cálculo de la coparticipación—, se alejó de La Cámpora en medio de un conflicto con la dirigente María Luz Alonso, y renovó la composición de su lista de concejales, incorporando a nombres de líneas tradicionales del PJ y al sector sindical de Jorge Lezcano y el telefónico César Montes de Oca.

En septiembre de 2023, reafirmó su alianza con la conducción de la CPE al expresar su apoyo público a la Lista Celeste, que enfrentaba una interna inédita impulsada por sectores políticos opositores. El apoyo del intendente —y el despliegue de recursos municipales, según denunció la lista rival— fue clave para que la Celeste se impusiera en una campaña breve pero intensa. Como coletazo, Carrascal dejó la presidencia de la CPE, reemplazado por el joven Manuel Simpson. Un año más tarde, Carrascal fue convocado por di Nápoli para hacerse cargo del Ente Municipal de Transporte Urbano.

El acercamiento a los Matzkin

En abril de este año, di Nápoli sacudió la interna peronista al presentar una lista para disputarle la conducción del PJ provincial al gobernador Ziliotto, quien intentaba evitar una interna mediante una lista de unidad. Sin embargo, la Junta Electoral invalidó la nómina del intendente por diversas irregularidades y la elección no se concretó.

Ese mismo día, di Nápoli y su pareja, la secretaria de Gobierno Carmina Besga, se reunieron con el exministro menemista Jorge "Toto" Matzkin y su hijo David, empresario de medios. La foto del encuentro blanqueó una nueva alianza política. La radio FM de David Matzkin en Santa Rosa había sido el escenario elegido por el intendente para fundamentar la necesidad de disputar la conducción del partido.

Silencio ante el desembarco

En los últimos meses, comenzaron a verse en Santa Rosa los móviles y operarios de empresas contratadas por el Grupo Clarín para renovar su red de fibra óptica. El avance generó preocupación en la CPE, que pidió explicaciones al intendente. Según trascendió, no fueron atendidos. El expresidente Oscar Nocetti advirtió públicamente sobre "defecciones" de autoridades y sindicalistas que "son guapos" hasta que "tiemblan cuando aparecen los monopolios".

Di Nápoli hasta ahora eligió el silencio. Dos semanas atrás, envió al Concejo Deliberante un proyecto para ampliar las zonas autorizadas de cableado. Estampó su firma en el expediente y argumentó que se trataba de una "importante inversión para la ciudad", con capacidad para generar empleo directo e indirecto, mejorar la conectividad y ampliar la cobertura de servicios de telecomunicaciones.

"Su concreción impactará de manera directa y significativa en el mercado laboral local, con la posibilidad de generar mayor cantidad de puestos de trabajo, forma directa e indirecta, mediante el incremento de la demanda de materiales y servicios anexos", señaló en la fundamentación.

"Además, permitirá modernizar la infraestructura de comunicación, mejorar la conectividad a la ciudad, ampliar el área de cobertura de fibra óptica y brindar la posibilidad de acceder a una mejor calidad del servicio público de telecomunicaciones, siendo ello de interés público y social para los habitantes de la ciudad de Santa Rosa", completó.

La parábola del intendente di Nápoli condensa más que una contradicción. Refleja cómo la gestión de gobierno y la disputa política pueden llevar a terminar legitimando aquello que combatían. En esa transición, las convicciones se enfrentan a las necesidades, las alianzas mutan y los silencios dicen tanto como los discursos.

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