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EL DIARIO digital
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La lucha contra el narcotráfico en Santa Rosa sumó un nuevo capítulo puertas adentro de la Unidad 4 del Servicio Penitenciario Federal. Por orden del Juzgado Federal, efectivos policiales y auxiliares de justicia realizaron un minucioso allanamiento en el pabellón donde se aloja un interno de nacionalidad paraguaya, presunto eslabón de una red delictiva de mayor escala.
Durante poco más de una hora, el personal de seguridad que incluyó efectivos vestidos de civil registró cada rincón de la celda. Si bien el resultado fue negativo en cuanto al hallazgo de sustancias prohibidas, los investigadores se llevaron un botín clave para la causa: papeles y cuadernos con anotaciones manuscritas.
La contabilidad del narco Según pudo saber El Diario, los documentos secuestrados contienen números de CBU (Claves Bancarias Uniformes) y otros datos financieros que revelarían cómo se movía el dinero de la organización. Para la Justicia, estas anotaciones son el "mapa" para desentramar el financiamiento y el cobro de la venta de estupefacientes en la región.
La sombra de "V.G." La investigación, que se maneja bajo estricto hermetismo, apunta a una organización piramidal cuya cúspide estaría ocupada por una mujer. Las iniciales V.G. ya figuran en el expediente como la presunta jefa de la banda. El interno allanado sería un contacto directo que, aun estando tras las rejas, mantendría vínculos con la logística externa de la organización.
El procedimiento contó con la presencia de dos testigos civiles para garantizar la legalidad del acta. Por estas horas, el material secuestrado es sometido a pericias caligráficas y análisis bancarios. En los pasillos de la Justicia Federal no descartan que, tras el análisis de estos CBU, se desaten nuevos allanamientos y detenciones en las próximas horas.