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EL DIARIO digital
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El próximo lunes 7 de julio, desde las 8:30 de la mañana, se realizará la audiencia de prueba en la causa por el homicidio de Lía Falcón, la joven que falleció atropellada el jueves 16 de enero.
Será una audiencia presencial donde las partes expondrán las pruebas dentro del expediente judicial y es formalmente el último paso antes de decidir la elevación a juicio y la fecha de debate.
El Ministerio Público Fiscal presentó a principios de junio la acusación contra Francisco Roldán, el conductor que -en exceso de velocidad y cruzando un semáforo en rojo- atropelló y mató a Lía. La acusación se amplió porque se comprobó que el conductor usaba el celular mientras manejaba. El juicio podría empezar sobre fines de este año.
"La Fiscalía ofreció todas las evidencias para acreditar el hecho, como también la calificación jurídica, y ya con la presentación de la acusación, comienza la etapa de procedimiento intermedio", explicó en ese momento a El Diario el fiscal Marcos Sacco.
Roldán había sido formalizado por "homicidio culposo" y por ahora permanece con el beneficio de la prisión domiciliaria.
El siniestro ocurrió alrededor de las 17 horas del jueves 16 de enero. Roldán iba con su Ford Falcon por el carril central de la Circunvalación en dirección al norte de la ciudad. Al llegar al cruce semaforizado con la calle Cavero, el automóvil atropelló a la joven de 22 años que cruzaba desde la esquina por la senda peatonal.
El auto, según confirmaron desde el MPF, circulaba a una velocidad de entre 99 y 117 kilómetros por hora, y cruzó con el semáforo en rojo. Al momento del impacto, el Ford Falcon habría alcanzado los 108 kilómetros por hora y necesitó 110 metros para frenar esa marcha. Esos son los datos se desprenden de las pericias realizadas por la Agencia de Investigación Científica.
El informe de la pericia del celular también tendría un dato llamativo: segundos antes del siniestro, Roldán había usado el celular o al menos tenía las aplicaciones abiertas.
La pena que podría recibir el conductor del auto va entre los 3 y los 6 años. El Código Penal Argentino no prevé como agravante el uso del celular, pero sí la velocidad y pasar un semáforo con rojo. Si la pena que le den a Roldán es de tres años, no irá preso. Si es mayor, el hombre sí terminará detrás de las rejas.
