Quórum: la oposición analiza hasta dónde puede tirar de la cuerda

La oposición política provincial tiene bajo análisis cuál será su posición y conducta frente al debate central que se viene: la discusión legislativa para avalar o no el aporte solidario obligatorio que el gobierno provincial ideó para juntar fondos que le permitan afrontar la emergencia alimentaria derivada del ajuste.

Una de las disyuntivas que tienen los distintos espacios no oficialistas es determinar si darán o no quórum cuando se trate la propuesta del gobernador Sergio Ziliotto. Hay quienes ya estiman que en el primer encuentro la oposición pegará el faltazo, como para marcar la cancha, independientemente de lo que pueda ocurrir más tarde.

Es decir: forma parte del análisis la chance de negar el quórum en primer término. Pero bajo la impresión de que tampoco se puede sostener todo el tiempo esa actitud. Hay legisladores que creen que ese mensaje político potente sería suficiente como para demostrar la nueva realidad del Poder Legislativo, hacerle pagar algún costo al oficialismo y obligarlo a establecer consensos como no era norma.

A imagen y semejanza

Si para muestra basta un botón, lo que ocurrió en el Concejo Deliberante de Santa Rosa puede ser un camino a seguir: la oposición no dió quórum cuando se trató en primer término el aumento de precio del boleto de colectivos, ya que se retiró del recinto con el argumento de que había información insuficiente. Pero en la segunda convocatoria dio el presente aunque votara en contra.

Aunque los distintos bloques vienen agitando un posicionamiento de crítica a todo lo que tenga que ver con el gobierno provincial, el contexto también plantea algunos dilemas.

Rejunte por el cambio

El radicalismo, el PRO y Comunidad Organizada acordaron incluso antes del inicio del año legislativo que actuarían en conjunto frente a una oportunidad literalmente extraordinaria que le dio el resultado de las elecciones: la Legislatura quedó en paridad y además de poder manejar el quórum la oposición si actúa en conjunto puede forzar a la vicegobernadora Alicia Mayoral a desempatar en varios asuntos.

Volviendo al ejemplo de la capital provincial, así pasó esta semana con la imprescindible intervención de la viceintendenta Romina Montes de Oca para definir la situación del boleto.

El posicionamiento legislativo es de algún modo anticipo de lo que se viene: la oposición ya trama un rejunte general para afrontar las elecciones de los próximos años, porque las últimas experiencias demuestran la posibilidad real de dar pelea mano a mano por la Gobernación en 2027.

Especulaciones y tironeos

En la coyuntura, se suma la curiosidad de que ante la primera referencia pública del aporte solidario obligatorio, el propio Hipólito "Poli" Altolaguirre, jefe del bloque de la UCR, deslizó que le parecía una buena idea. Duró poco esa mirada, porque a las horas el bloque ya había difundido un comunicado rechazando la propuesta.

Incluso ya suenan otras fundamentaciones que parecen ser paraguas abiertos por si se decide negar el quórum: por ejemplo, la oposición no sólo se niega al "nuevo impuesto" sino que patalea porque no hay información suficiente.

Aún así, la UCR y sus socios locales evalúan que hay un límite para tirar de la cuerda, ya que la mirada de la opinión pública también tiene en cuenta que algunos de esos dirigentes opositores en La Pampa aparecen asociados a un gobierno nacional especialmente ajustador, que es el que provocó la actual situación que requiere de tarifazos o de búsqueda de recursos para atender necesidades básicas.

Esos tironeos se sienten también fronteras adentro: hay intendentes del sector de Juntos por el Cambio que advierten a sus propios correligionarios que el gobierno provincial se está manejando de acuerdo a la lógica y según los recursos disponibles.

Nadie ignora que las decisiones de Milei han atacado especialmente a las cajas provinciales y el funcionamiento de diversos servicios y acciones estatales. Por más que haya quienes remachan en la "pesada herencia", es un hecho que lo que derrama a La Pampa, como al resto de las provincias, es el impacto de la motosierra de La Libertad Avanza.

Eso, justamente, plantea una gran duda que atraviesa a la oposición pampeana: ¿es justo, suena bien socialmente, que frente a esa ofensiva se retacee el quórum, en lo que parece un virtual castigo al gobierno peronista local, cuando la madre del borrego son los tijeretazos de Nación?