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EL DIARIO digital
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Un nutrido grupo de trabajadores y trabajadoras marcharon desde la Plaza San Martín hasta la oficina de ese organismo gubernamental ubicado en Lagos García y Bolivia (en barrio Fitte), para pedirle a Pedehontáa que termine con las multas a la aplicación que les permite trabajar y obtener un ingreso.
Las multas a la aplicación son por trabajo no registrado, trabajo en negro. Ya suman unas 50 multas por decenas de millones de pesos. Las multas todavía no fueron efectivas y están en instancia administrativas y judicial.
"Queremos que termine el hostigamiento. Nosotros somos monotributistas y tenemos seguro. No es trabajo en negro", dijo unos de los trabajadores.
Los trabajadores y las trabajadoras afirman que pueden redondear ingresos de 400 mil a 500 mil pesos de acuerdo a las horas de trabajo.
Hace más de un año que la secretaría de Trabajo inició los expedientes. Pero los trabajadores ya mantuvieron repetidas reuniones con Pedehontáa para pedirle que los deje trabajar. Pero el organismo insistió en su interpretación que se trata de trabajo no registrado.