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EL DIARIO digital
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A Guarrochena se lo juzga como acusado como crímenes de lesa humanidad cometidos contra 398 personas la ESMA. El imputado -que quedó como único acusado tras la muerte de Gerardo Enrique Ferrer, exjefe de la Compañía B de Ceremonial de la ESMA, quien también iba a ser juzgado- fue fotografiado por Víctor Basterra en el informe que lleva su nombre y con el que se identificó a 77 genocidas de ese centro clandestino.
En el caso de Santos, dio testimonio por primera vez y después de 45 años de padecer su historia como sobreviviente.
A fines de noviembre de 1979 fue secuestrado Daniel Oscar Oviedo, quien entonces era su pareja y con quien vivía en el barrio porteño de Colegiales junto a su hija María Sol, de 1 año y medio.
Santos, oriunda de General Pico, se refugió en la provincia junto a sus padres que vivían en la ciudad del norte provincial. "Me llevaban al campo, a pueblitos cercanos, estuvimos en Carhué, en Santa Fe, diferentes lugares, un ratito en cada lado para que no me encontraran", contó en su declaración el Tribunal Oral Federal 5 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Finalmente pudo salir a Brasil, aunque su exilio en San Pablo fue frustrado como consecuencia de una extorsión ideada desde la ESMA. Tenía 23 años y retornó para salvar a su compañero: "no lo pensé más y quería que la nena conociera a su padre, todas las personas cercanas me decían que era locura", relató.
Tras su regreso, pasó a estar años en libertad vigilada junto a su hija.
El testimonio completo se puede ver en el video del portal La Retaguardia, que refleja la audiencia, desde el minuto 17:55.