El juez que Rigutto intentó "influenciar", se apartó del caso

El juez de Control, Raúl Míguez, quien tenía a cargo la causa principal en contra del médico Jorge Rigutto  -relacionada con denuncia por violación de una expareja- decidió apartarse del caso.

De acuerdo a lo que pudo saber El Diario, Miguez se apartó no por exigencia de la defensa de Rigutto sino porque se vio envuelto en un episodio en el que el propio Rigutto -a través de un corresponsal de un medio local, que opera mediáticamente a favor suyo- y el médico forense Juan Carlos Toulouse lo habrían intentado "influenciar".

"Concretamente, se contactaron con él para tratar de influenciarlo... por eso el juez Miguez se presentó en calidad de testigo y manifestó que ambos le hicieron tomar decisiones engañosas. Eso hace que no pueda estar en el caso, porque ya tiene una posición tomada a partir de que ellos mismo lo involucraron", explicó a este diario una fuente con vinculaciones al expediente.

Rigutto y el periodista

Tal como publicó El Diario, un dato que surgió de las escuchas telefónicas -que dieron origen a la causa por engañar a la justicia- fue un intento del cirujano de usar "influencias" para mejorar su situación de detención.

En ese sentido, aparecen llamados de Rigutto a un periodista de General Acha -corresponsal de un medio gráfico provincial- para que interceda en el tratamiento de su pedido de domiciliaria ante el juez Míguez, con quien iba a compartir una reunión, un asado. Rigutto y el periodista tendrían relación comercial o de amistad.

Otro dato que emerge de las escuchas son las presuntas "presiones" del forense Juan Carlos Toulouse sobre otro forense de apellido Veliz, que había emitido un informe distinto a los anteriores y dijo que Rigutto "podía ir a una cárcel común". Sin embargo, lo cambió y presentó otro para que siga en domiciliaria hasta el juicio.

Toulouse, en los diálogos con Rigutto, le cuenta que para presionar a Veliz le aseguró que había ido a hablar con el ministro del Superior Tribunal de Justicia, Hugo Díaz, y el secretario de Servicios de Jurisdicción del Poder Judicial, Marcelo Rebuffi.

El único teléfono intervenido por la justicia es de Rigutto y los datos surgen de los diálogos entre el acusado y el forense, que no participa en la causa, pero que en forma particular firmaba los informes.

A pedido de la Fiscalía, se secuestraron los celulares de los demás implicados y de Rigutto, quien lo tiró al inodoro cuando el personal policial se lo requirió. El equipo fue recuperado y también se analiza la participación en esta causa de la pareja de Rigutto.