La decisión del Bloque del Frente de Todos en el Senado de la nación de dividirse para ocupar un lugar más en el sillón del Consejo de la Magistratura, en la nueva composición ordenada por la Corte Suprema de Justicia, tiene un antecedente pampeano: la ruptura de la Alianza Cambiemos en UCR y PRO en la legislatura provincial, lo cual le permitió a esta última fuerza erigirse numéricamente -y no por voluntad popular- como la segunda minoría; y alzarse con varios lugares en directorios de empresas con participación estatal como Pampetrol y EMPATEL.
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EL DIARIO digital
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Cuando se conformó la actual legislatura provincial, la misma quedó integrada por una mayoría, la del FreJuPa con 17 bancas, una primera minoría de 11 bancas que había quedado en manos de la Alianza Cambiemos La Pampa; y una segunda minoría con dos bancas que había conseguido Comunidad Organizada (CO).
Al armarse los bloques, la Alianza Cambiemos se separó en UCR y Propuesta Federal con siete y cuatro diputados respectivamente.
De esta manera, numéricamente, el Bloque Propuesta Federal quedó como la segunda minoría y así aportó -no sin polémica- los directores a distintas empresas estatales ante el reclamo no escuchado del exintendente y líder de CO, Juan arlos Tierno, que reclamaba para sí esos lugares.
En el caso de Pampetrol, el macrismo local colocó como síndico a Martín Matzkin, arrogándose la segunda minoría legislativa, cuando el tiernismo fue la tercera fuerza electoral en la última elección y -por lo tanto- le correspondía ese derecho según el sufragio electoral.
Esa interpretación de la ley que regulaba a Pampetrol estaba reforzada porque cuando el macrismo también había reclamado ese lugar años atrás, el entonces gobernador Carlos Verna designó a una profesional propuesta por Pueblo Nuevo, que había sido la tercera fuerza electoral –y segunda minoría- en los comicios previos. En esa oportunidad, como ahora, el macrismo había hecho rancho aparte del radicalismo, apenas terminados los comicios.
De la misma manera, el macrismo lugareño coló a sus alfiles en otros directorios haciendo gala de esa “segunda” minoría, como el de EMPATEL, con la designación de Eduardo Helt y María Lis Fraire, cuyos pliegos en ese momento no fueron votados ni por la UCR ni por -obviamente- Comunidad Organizada.