¿Y la casta?

"El facha" Matzkin siempre cae parado, aunque sea sobre la alfombra más raída de la política. Ahora se nos presenta como una de las caras libertarias en La Pampa y promete "dar la batalla por la libertad, el orden y el cambio verdadero que eligieron los pampeanos". ¡Y lo dice sin despeinarse!

Porque claro, nada grita más "cambio" que un apellido de casta y una carrera a los saltos: juez de Faltas en Catriló, sillón en Casa de Piedra con Macri, paso por Pampetrol y ahora funcionario en el gobierno de Milei.

Al final, parece que el verdadero talento de "el facha" es reencarnarse en cada turno de la rueda. Y ahí va, convencido de que nadie se acuerda de su largo y variopinto recorrido de casta.