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EL DIARIO digital
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Los huesos fueron encontrados en un camino vecinal entre Rosario del Tala y Sauce Norte. Todo indica que se trata de las partes del cuerpo de Martín Palacio que aún no habían sido localizadas.
Un vecino que caminaba por un camino rural entre Rosario del Tala y Sauce Norte, en Entre Ríos, se topó con una bolsa negra de la que emanaba un olor nauseabundo. Al abrirla, descubrió una escena macabra: un fragmento de cráneo, una vértebra cervical, huesos que corresponderían a los brazos de una persona y restos de cabello. De inmediato, dio aviso a la Policía.
El hallazgo se produjo el miércoles alrededor de las 17.05. Según las primeras pericias, los restos podrían pertenecer a Martín Palacio, el remisero que fue asesinado presuntamente por el doble femicida cordobés Pablo Laurta.
Palacio, de 49 años, había sido contratado el 7 de octubre para trasladar a Laurta desde la terminal de ómnibus de Concordia hasta Rafaela, en Santa Fe. Desde ese momento se perdió todo rastro del chofer. Su auto, un Toyota Corolla blanco con techo negro, apareció incendiado días después en el Camino de las Altas Cumbres, en Córdoba.
Una semana más tarde, cuando Laurta ya estaba detenido por el doble femicidio de su expareja, Luna Giardina, y su exsuegra, Mariel Zamudio, la Policía de Entre Ríos había encontrado en Estación Yeruá un cuerpo mutilado que se atribuyó a Palacio, aunque faltaban la cabeza y los brazos.
El ministro de Seguridad entrerriano, Néstor Roncaglia, había afirmado entonces que "noventa y nueve por ciento se trata de Palacio". Las autoridades repitieron ahora la misma expresión tras el nuevo hallazgo, dado que los restos coinciden con las partes faltantes.
En los rastrillajes de este jueves se encontraron además "17 piezas óseas fragmentadas, dos con piezas dentarias, una campera con capucha a rayas azules y celestes con manchas hemáticas y un par de medias oscuras", según confirmaron fuentes de la investigación.
El Ministerio Público de Entre Ríos imputó a Laurta por el homicidio criminis causae de Palacio, cometido entre las 19.54 del 7 de octubre y las 3 del 8 de octubre. El acusado enfrenta prisión perpetua según el inciso 7 del artículo 80 del Código Penal, que castiga a quienes matan para facilitar u ocultar otro delito.
Las cámaras de seguridad de la terminal de Concordia captaron el momento en que Laurta subía al vehículo de Palacio, y otras imágenes lo mostraron horas más tarde cargando combustible solo. Luego, fue registrado mientras incendiaba el auto robado.
Laurta permanece detenido con prisión preventiva en Entre Ríos. Al ser indagado, sostuvo: "Quería rescatar a mi hijo de una red de trata". Posteriormente fue trasladado a Córdoba, donde también está acusado de los homicidios de su expareja y su exsuegra.
