Escuchá esta nota
EL DIARIO digital
minutos
Un método casero, económico y natural permite evitar la humedad y alejar insectos como los gorgojos. Solo se necesita un corcho limpio dentro del frasco.
Cuando la harina permanece mucho tiempo guardada, ya sea en su envase original o en un frasco, corre el riesgo de absorber humedad, generar grumos y atraer insectos como los gorgojos. Para prevenirlo, existe un truco casero transmitido de generación en generación que sigue vigente: colocar un corcho dentro del recipiente.
El corcho tiene la capacidad de absorber la humedad, manteniendo el interior del frasco seco. Además, desprende un aroma particular que resulta desagradable para los insectos, funcionando como un repelente natural y sin químicos.
Cómo aplicarlo correctamente
- Usá un corcho limpio, preferentemente de vino y sin restos de bebida.
- Colocalo dentro del frasco o recipiente donde guardás la harina.
- Cerrá bien el envase y almacenalo en un lugar fresco y seco.
De esta forma, la harina se conserva en buen estado por más tiempo y sin sorpresas desagradables.
Recomendaciones extra
- Guardala siempre en recipientes herméticos.
- Mantenela alejada de fuentes de calor y humedad.
- Revisá periódicamente el contenido para asegurarte de que no aparezcan plagas.
Un gesto tan simple como agregar un corcho puede marcar la diferencia entre una harina bien conservada y una infestada.