El 94% de las inscripciones en Medicina son de La Pampa
Escuchá esta nota
EL DIARIO digital
minutos
Hoy, viernes 26 de diciembre, se llevará a cabo en Victorica la audiencia de control de acusación y ofrecimiento de pruebas en la causa contra Sebastián Fuentes, de 18 años, quien el 20 de abril de este año hirió mortalmente con un arma blanca a su padre legal, Néstor Hugo Fuentes, de 38, tras una discusión que se habría originado cuando la víctima intentó impedirle que condujera una moto en estado de ebriedad. En el marco de la investigación de lo ocurrido, un estudio de ADN determinó que no era su progenitor biológico, lo que podría morigerar la pena en expectativa al no configurarse el agravante por el vínculo.
La audiencia será presidida por el juez de Control Carlos Roberto Espínola y tendrá como finalidad evaluar si la acusación presentada por el Ministerio Público Fiscal cumple con los requisitos legales para avanzar a la instancia de juicio oral. En caso de ser admitida, se deberán fijar las fechas del debate y realizar el sorteo del tribunal que intervendrá en el proceso.
El hecho ocurrió alrededor de las 8 de la mañana del domingo 20 de abril en un domicilio ubicado sobre la calle 24 entre 1 y 3 de la localidad oesteña. De acuerdo con la reconstrucción fiscal y las crónicas policiales publicadas en ese momento, Sebastián Fuentes había regresado horas antes de un local bailable, se encontraba en estado de ebriedad y pretendía utilizar una motocicleta.
Según esa versión, Néstor Fuentes intentó impedir que el joven condujera en esas condiciones, lo que dio inicio a una discusión dentro de la vivienda. En ese contexto, el imputado habría ingresado a una de las dependencias del domicilio, tomado un cuchillo y regresado para asestarle dos puñaladas en la zona del tórax a la víctima.
Tras la agresión, un vecino intervino y trasladó al herido en un vehículo particular hasta el Hospital "Luisa P. de Pistarini" de Victorica. A pesar de la atención médica recibida, el hombre apuñalado falleció poco tiempo después debido a la gravedad de las lesiones.
Algunas crónicas periodísticas publicadas en los días posteriores al hecho señalaron que, al momento de la intervención policial, Sebastián Fuentes se encontraba en el lugar con un fusil, y que habría intentado autolesionarse, aunque ese extremo no fue confirmado oficialmente por la fiscalía ni figura como hecho acreditado en la causa pública.
Investigación
La investigación quedó a cargo del fiscal Enzo Rangone, de la IV Circunscripción Judicial, con la participación de la Agencia de Investigaciones de General Pico, que realizó las pericias iniciales y la recolección de pruebas. Durante la audiencia de formalización de la investigación fiscal preparatoria, el hecho fue calificado en un primer momento como homicidio agravado por el vínculo, figura contemplada en el artículo 80 inciso 1 del Código Penal, y el juez dispuso la prisión preventiva del imputado.
En esa instancia, Sebastián Fuentes estuvo asistido por la defensora oficial María Soledad Trimboli. Días más tarde, la defensa pasó a estar a cargo del abogado Mariano Gastón Gualpa, quien solicitó distintas medidas probatorias, entre ellas el análisis del contexto familiar del imputado y la posible existencia de un clima de violencia intrafamiliar, teniendo en cuenta que la víctima había recibido en 2019 una condena en suspenso.
Asimismo, el defensor pidió la realización de un cotejo genético entre la víctima y el imputado, ante versiones que indicaban que no existiría una relación biológica de padre e hijo, pese a que Sebastián llevaba el apellido Fuentes. El Ministerio Público Fiscal no se opuso al pedido y la prueba fue realizada por el Laboratorio de Genética Forense, cuyo resultado indicó que no existía vínculo biológico entre ambos.
A partir de esa prueba, la fiscalía reformuló la acusación y actualmente sostiene la calificación de homicidio simple, con una calificación subsidiaria de homicidio simple cometido en estado de emoción violenta, encuadres que serán evaluados en la audiencia de hoy.
Cabe señalar que la pena prevista para el homicidio agravado por el vínculo es de prisión perpetua, mientras que el homicidio simple contempla una escala de 8 a 25 años de encierro. En el caso de acreditarse el estado de emoción violenta, la pena podría reducirse a entre 1 y 3 años, conforme lo establecido en el artículo 81 inciso a del Código Penal.
Durante el desarrollo del proceso, Sebastián Fuentes se mostró visiblemente afectado en las distintas audiencias. En ese marco, solicitó autorización judicial para asistir al sepelio de la víctima, pedido que fue concedido por el juez Espínola por un lapso de 15 minutos, bajo custodia de personal de la Alcaidía.
El imputado permanece detenido a la espera de la resolución que surja de la audiencia de este viernes. Si el juez considera procedente la acusación fiscal, la causa avanzará hacia el juicio oral, que podría desarrollarse durante los primeros meses de 2026.
