Escuchá esta nota
EL DIARIO digital
minutos
Los choferes y dueños de taxis de la capital pampeana se movilizaron este jueves a partir de las 10:00 horas frente a la Municipalidad para expresar su descontento con el borrador de la ordenanza que busca regular el servicio de aplicaciones de transporte.
El sector, que ya había protestado días atrás, advirtió que la propuesta "está lejos de lo que habíamos hablado" y no garantiza una competencia leal.
Luego de la movilización frente al municipio, la protesta se trasladó luego al recinto del Concejo Deliberante. Allí fue uno de los choferes el que llevó la voz cantante.

"Regular es ponerle ética a una actividad", afirmó y aclaró que los taxistas "estamos dispuestos a cooperar".
Pero luego describió el sombrío panorama que atraviesa el servicio frente a la actual crisis económica. "Creer que nuestro sector puede albergar todas vicisitudes de un proyecto económico fallido, de despidos, de gente que no lega a fin de mes Ya no se puede contener todo eso", indicó.
"Tienen que ver qué van a ponderar, si los costos políticos o los costos sociales que vamos a pagar nosotros", les reclamó a los concejales de los diferentes bloques.
"Aceptar esta regulación es aceptar la redistribución de la miseria no alcanza para todos, necesitamos que hagan algo, que asuman el compromiso por favor", destacó.
Y subrayó: "Sigan sus corazones, es una cuestión de ética laboral no es tan difícil ese es el compromiso que necesitamos de este Concejo, no nos suelten la mano en este momento, porque cuando fuimos esenciales también estuvimos en la pandemia".

El secretario general de los choferes, José María Boccalatte, había sostenido en la previa que el proyecto "regula a los coches Uber, pero no regula a Uber", lo que consideró "una barbaridad".
Ante la falta de un acuerdo con el Concejo Deliberante, el gremio intensifica su reclamo y busca una reunión con el intendente Luciano di Nápoli.
Igualdad de condiciones
El principal punto de conflicto es que, según los taxistas, la normativa no exige a los conductores de aplicaciones la misma carga regulatoria que al servicio tradicional. Los trabajadores reclaman que los choferes de Uber cumplan con los mismos requisitos que ellos, como carnet profesional, antigüedad de los vehículos, inscripción en la municipalidad, seguros específicos y el pago de aportes impositivos.

El conflicto se remonta a agosto de 2024, cuando la plataforma desembarcó en la ciudad. Desde entonces, el sector ha realizado protestas y caravanas para pedir la intervención del municipio. Si no se logra un acuerdo, Boccalatte adelantó que podrían endurecer aún más sus medidas de fuerza.
