La Pampa

Se dobló y se partió

El popularísimo vecino santarroseño, Beto Desuque, dialogando con su mozo predilecto en el restobar de la calle Quintana: un poco de fútbol, paisajes costumbristas, personajes de acá a la vuelta y muuuucha politiquería.

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EL DIARIO digital

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Beto Desuque: - Buenas, buenas, buenas, bueeeenaaass… ¿qué tal, qué tal, qué tal? ¿Cómo anda la mano por acá, qué se cuenta y qué se dice?

Mesero: - Betito querido y del alma… se va el invierno nomás…

Beto Desuque: - Se va, se va… ya se huele la primavera. Aunque… ¡qué semanita! Para mecharse entre los vetos, que no son Beto, esta semana ni la Selección zafó.

Mesero: — No exageres, Betito. Fue una derrota y punto. A veces mejor perder un partido así, que no define nada.

Beto Desuque: —Ponele. Eliminatorias terminadas. Aunque algunos muchachos parecen un poco sobrados y confiados.

Mesero: - Será tiempo de barajar y dar de nuevo algunas cartas.

Beto Desuque: - Ponele. Como los radichetas pampa.

Mesero: - Apa. Ya metiste la cuchara de la politiquería.

Beto Desuque: - Es que cuando te creés invencible, terminás tropezando con la misma piedra… o con el mismo barril de petróleo.

Mesero: —¿Otra vez Medanito?

Beto Desuque: —Claro, hermano. El axioma radical decía "que se rompa pero que no se doble". Y estos muchachos inventaron la versión pampeana: primero se doblaron y después se partieron.

Mesero: - Qué despiole tienen, ¿no?

Beto Desuque: - Ponele. No me gustaría estar bajo sus boinas blancas. Je. Empezaron la gestión diciendo que la oposición en su conjunto era todo un bloque unido. Se decían casi un bloque de 15 diputados y diputadas…

Mesero: - Y no. Ya dijiste. Se doblaron y se partieron.

Beto Desuque: — Poli Altolaguirre quedó más solo que El Loco Tierno en el día del amigo. Parece que Javier Torroba pactó por su lado y Medanito salió rapidita para los mandatos.

Mesero: - O sea… lo dejaron a Poli bicicleteando en el aire.

Beto Desuque: - Seee. Quedó como el meme de John Travolta. Y Torroba en el mismo bando que el peronismo de Lovera, o con el PRO de Trapaglia. Más que partirse la UCR, se partió toda la opo. La casa no está muy en orden que digamos.

Mesero: —¿Y qué dice Poli Altolaguirre?

Beto Desuque: - Denunció un arreglo "entre gallos y medianoche", como si la Legislatura se hubiera convertido en surtidor clandestino.

Mesero: - Supongo que muy contento no estaría…

Beto Desuque: — Y no. Obvio que quedó re caliente. Mascullando bronca, con Martín Berhongaray dándole palmaditas y Sandra Fonseca abriéndole la puerta del club de los marginados.

Mesero: — ¿Pero entonces la UCR quedó partida para las elecciones que se vienen también?

Beto Desuque: — No sé si tanto. Pero el bloque está partido como caño oxidado. De un lado, el bloque de Torroba que se acomodó con el PJ y el PRO; del otro, el grupo de Poli, jurando que no se vende ni por un litro de nafta súper.

Mesero: —¿Qué dirá la tribuna?

Beto Desuque: —Y… no sé si es un tema que tanto mire la tribuna. Con las sospechas que han agitado desde tantos lados, la palabra coimas da vueltas por ahí… pero nadie hace una denuncia concreta.

Mesero: - ¿Para vos quiénes son ganadores en este lío?

Beto Desuque: - Yo creo que la UCR batió un record…

Mesero: - …

Beto Desuque: - El radicalismo pampeano logró lo que parecía imposible: doblarse y romperse al mismo tiempo. Ni Alem en sus noches más sombrías lo hubiera imaginado.

Mesero: - Jaja. Pero en serio, te digo.

Beto Desuque: —Y… ganó el peronismo, querido. Tengo ganas de decirte: "no importa cuando digas esto", pero no hay que exagerar. El asunto es que la licitación está, el principal bloque opositor hecho pelota y los radichetas peleándose por quién se quedó con el bidón.

Mesero: - Mirá vos…

Beto Desuque: - Y de yapa, en el otro campamento, el de los compañeros, parece que empezaron a alinearse algunos planetas… no digo que la interna está sanada, pero hay gestos de amistad.

Mesero: - ¿Decís de El Ruso Ziliotto con Copete y El Barba?

Beto Desuque: - Eso mismo. Se ve que la vieron con las cosas que fueron pasando en las últimas semanas… y bueno, se cuadraron: olieron sangre y ensayan la firma del pacto de unidad hasta que duela. Ponele.

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