Escuchá esta nota
EL DIARIO digital
minutos
General Pico (Agencia) Fiscalía y Defensa acordaron penas de un año y medio de prisión para dos jóvenes, para uno de ellos en suspenso y para el otro de cumplimiento efectivo, ambos autores de un violento robo ocurrido en el mes de mayo en pleno centro de la ciudad en perjuicio de un vecino a quien sorprendieron en el interior de su casa y amenazaron con un arma de fuego. Un tercer involucrado, menor de edad con múltiples ingresos a sedes policiales, quedó desvinculado del acuerdo de juicio abreviado arribado en la causa.
El juez de Audiencia de Juicio de General Pico Marcelo Pagano confirmó ese arreglo y condenó a Juan Manuel Airaudo y a Lucas Matías Gómez, ambos de 19 años, como coautores materiales y penalmente responsables del delito de "robo doblemente agravado por haber sido cometido con un arma de fuego, cuya aptitud para el disparo no pudo ser de ninguna manera acreditada, y en poblado y banda, en grado de tentativa".
A Airaudo lo condenó a un año y seis meses de prisión de ejecución condicional y le impuso reglas de conducta a cumplir por el término de dos años. En el caso de Gómez, la sentencia fue del mismo plazo pero de efectivo cumplimiento y le revocó la condicionalidad de una pena anterior, de tres años de prisión por la comisión de otros robos agravados cometidos con armas impropia y de utilería. La unificación de ambas condenas completa una sentencia única y total de cuatro años y seis meses de prisión.
La pena fue dictada en el marco de un acuerdo de juicio abreviado solicitado por el fiscal Juan Cupayolo, los imputados y sus abogados defensores, Walter Vaccaro y Héctor Freigedo. El damnificado, al ser informado sobre sus causas, prestó su conformidad.
Respecto al menor de edad, su situación procesal no fue incluida en el acuerdo, ya que se le tramita una suspensión de juicio a prueba ante un juez de Control.
Robo violento
El hecho tuvo lugar el pasado 19 de mayo y causó conmoción en Pico por la violencia con la que actuaron los delincuentes y, además, por haber sido cometido en pleno centro de la ciudad y con la activa participación de vecinos que se involucraron en la persecución de los autores.
Ocurrió cuando un comerciante de la calle 20 entre 17 y 19 cerró su local e ingresó a su vivienda, contigua, a la que se accede por una puerta que da a la vereda y que el damnificado dejó sin llave porque esperaba, en cuestión de un par de minutos, que llegara su esposa.
Airaudo y Gómez, junto al menor de edad, al parecer vieron los movimientos de la víctima e ingresaron a la vivienda. El hombre escuchó ladrar a su perro y fue hacia el pasillo que da a la puerta de ingreso y allí fue sorprendido por los tres jóvenes.
Uno de los ellos le apuntó con un arma de fuego corta, tipo pistola, y le ordenó: "Tirate al piso, dame la plata, dame lo que tengas, no levantes la cabeza". En el mismo momento, los restantes lo tomaron del cuello por detrás y lo golpearon mientras lo trasladaban hacia una de las habitaciones, que da a la vereda.
El damnificado comenzó a forcejear con los asaltantes, mordió a uno de ellos en los dedos de las manos y logró también abrir una de las hojas de la ventana para pedir ayuda a gritos. Ante ello, los jóvenes se retiraron del lugar, sin sustraer elemento alguno, y fueron perseguidos por vecinos que se encontraban en la vereda de enfrente y escucharon los gritos. El menor y Airaudo fueron aprehendidos en cercanías del domicilio de la víctima, y Gómez, con posterioridad.
En referencia a las penas a imponer, el juez recordó que" la magistratura se encuentra limitada por el pedido de pena y, además, está impedida de cuestionar la acordada ya que este es el centro de la negociación entre las partes y por lo tanto ajena a cualquier injerencia del juez. Por tal motivo la fijaré en el monto solicitado para cada uno de los imputados".