La Pampa

El "Plan Remontar" no alcanzó, pero dejó un saldo "positivo" en el Gobierno de Ziliotto

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Se sabía que el "Plan Remontar" iniciado por el oficialismo en la provincia en estas elecciones legislativas, para revertir los 20.000 votos abajo que había quedado en las PASO, era subiendo la cuesta. Y eso se notó a la hora de caminar la calle desde el 12 de septiembre al 14 de noviembre.

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Sin embargo, a pesar de que todos los esfuerzos no alcanzaron, en la gestión del gobernador Sergio Ziliotto hicieron un balance "positivo" de los comicios en los que el peronismo pampeano salió derrotado por primera vez desde el retorno de la democracia.

Ayer, en voz baja, en medio del ruido interno, en los lugares más estratégicos del Centro Cívico rescataban la "nada despreciable" suma del 42 por ciento de los votos. Es que en un contexto sumamente desfavorable se lograron recuperar más de 15.000 sufragios.

Lo dijo el propio mandatario durante la conferencia de prensa posterior a los resultados: "No pudimos provincializar la gestión". No fue otra que un tiro por elevación a que los candidatos del Frente de Todos tuvieron que cargar sobre sus espaldas la desgastada imagen del Gobierno nacional, que está en uno de los peores momentos políticos y económicos.

A eso también hay que sumarle los problemas internos propios dentro del PJ pampeano, con un sector de la dirigencia que no acompañó la campaña de la misma manera.

En Santa Rosa, por ejemplo, el FdT quedó dos puntos por encima de Juntos por el Cambio, revirtiendo el resultado de septiembre. Pero en General Pico los números mostraron una realidad incontrastable: los candidatos del oficialismo apenas superaron el 30%.

Ahora habrá que ver cuáles son las consecuencias del resultado electoral. Puede pasar cualquier cosa, desde un realineamiento de las alianzas hasta una escalada en las peleas internas. Y la reconfiguración de los liderazgos asoma como algo ineludible.

Ziliotto se puso la campaña al hombro, se hizo cargo de los candidatos y él mismo dijo que se plebiscitaba su gestión, que -vale destacar- ni siquiera recibe cuestionamientos de la propia oposición. Pero los resultados electorales mandan.

"Las urnas hablaron y debemos respetar el voto popular. No hemos ganado, pero tenemos muchísimas cosas para festejar. Tenemos que festejar la participación de la militancia. Ese trabajo nos ha permitido recuperar más de 15.000 votos después de una elección del 12 de septiembre en donde no habíamos podido desarrollar el trabajo militante", reconoció el gobernador la noche después de la elección.

Y elaboró su propio diagnóstico: "No es fácil lo que nos tocó vivir y la historia nos dará el lugar a los que gobernamos en la pandemia. Hubo una clara elección del pueblo pampeano que pensó en lo nacional y que nos costó provincializar", apuntó.

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