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Conflicto en Género municipal: "Nuestro reclamo no está resuelto y no hay nada claro"

Las trabajadoras esperan tanto la resolución de su pedido de mejores condiciones laborales como el avance en las denuncias contra la directora Bonavitta.  El traslado al Centro Territorial Integrador de Políticas de Género no se realizará y no saben dónde irán a parar.

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EL DIARIO digital

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Las trabajadoras de la Dirección de Género de la Municipalidad de Santa Rosa realizaron una asamblea este miércoles para decidir los pasos a seguir en el conflicto que mantienen con la gestión municipal. "Nuestro reclamo todavía no está resuelto y no hay nada claro", indicó una de las trabajadoras luego de la asamblea.

"Por el momento no vamos a visibilizar nada, vamos a esperar teniendo en cuenta lo que viene pasando, y que ahora parece que reinará la armonía entre funcionarias que no articularon acciones nunca", agregó la trabajadora en diálogo con El Diario. Es que las representantes de la secretaría de la Mujer, la secretaría de Desarrollo Social del municipio y la Dirección de Género se reunieron para definir los trabajos de los equipos técnicos en el Centro Territorial Integrador de Políticas de Género, recientemente inaugurado en Santa Rosa.

El encuentro entre Liliana Robledo, Clarisa Alzuri y Gabriela Bonavitta (denunciada por violencia laboral) tenía la expectativa de resolver el espacio físico para las trabajadoras de la Dirección de Género, tal cual lo había prometido el intendente di Nápoli y ratificado la directora Bonavitta. Sin embargo, ese traslado no se realizará y las trabajadoras no saben dónde irán a trabajar, ya que el espacio en el SUM de Villa Germinal era temporario.

"Queremos dejar en claro que en concreto no hay nada. A casi cuatro años de la gestión de ambas (por Robledo y Bonavitta), ¿recién ahora se pueden sentar a definir líneas de acción?", se preguntó una de las delegadas.

"Nuestra situación laboral debería haber estado resuelto desde el principio y más aún desde la firma del convenio del Centro Territorial. Que ahora estén sentadas juntas tanto Robledo como Bonavitta es un logro nuestro, por la presión que hemos hecho y por siempre exponer nuestra problemática", agregó.

Luego de la polémica reflejada en El Diario, la trabajadora sostuvo que "no les queda otra que hacerse cargo, pero ambas están terminando su gestión y los equipos seguimos trabajando, manteniendo el servicio".

Y reiteró "nuestro reclamo todavía no está resuelto y no hay nada claro. Eso muestra la falta de comunicación y de gestión de ambas funcionarias".

Mientras tanto, las trabajadoras esperan tanto la resolución de su pedido de mejores condiciones en el espacio de trabajo como de la apertura de paritarias, al tiempo que esperan que avancen las denuncias contra la directora Bonavitta.

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