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Con la presencia de Víctor Aldo Pozo Grados, detenido ilegalmente durante la última dictadura militar, se hizo este lunes la inspección ocular en la comisaría de Jacinto Arauz, en el reinicio el tercer juicio a los represores de la Subzona 14.
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EL DIARIO digital
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"El juez federal le pidió que comentara sobre el lugar, si había modificaciones o no de cuando estuvo en el lugar", contó a El Diario Juan Carlos Pereyra del Movimiento Pampeano por los Derechos Humanos.
Pozo Grados, si bien cuando fue detenido tenía los ojos vendados, pudo reconocer que el calabozo como está hoy en día difiere al de aquella ocasión.
"Dijo que era un poco más grande... en este momento lo que hay en la comisaría son dos calabozos muy chicos", precisó Pereyra que también estuvo presente en el lugar junto a los abogados Alejandro Osio e Ivana Barneix.
Durante su declaración testimonian en el juicio, a principio de septiembre del año pasado, Pozo Grados recordó que el grupo de policías y militares que integraban la Subzona 14 lo sometió a un simulacro de fusilamiento y le gatillaron en la cabeza.
"No pude olvidarme nunca, transtornó mi vida", aseguró el médico veterinario peruano que en julio del ’76 fue detenido en Jacinto Arauz. Luego fue trasladado a la Seccional Primera y estuvo un año preso.
"Me gatillaron en la cabeza. Uno le dijo al otro ‘mire si se le escapa un tiro, coronel’. Me preguntaban cosas raras y la forma de dar clases en el Instituto a los chicos, sin castigos ni correctivos corporales, les llamaba la atención y hacían hincapié en eso", relató.
"A pesar de tantos años, no pude olvidarme nunca de todo lo que viví, sin dudas trastornó toda mi vida. Aún hoy duermo con sobresaltos, tal vez como consecuencia de eso. Para mí y mi familia fue muy duro, quedaron mi mujer y mi hijo que entonces tenía un año de edad, y la pasaron mal económicamente. Yo no entendía por qué me hicieron eso, no había motivo. Cuando llegué a mi casa mi hijo preguntaba quién era yo. Tiempo después pude rehacer mi vida", indicó.
Cómo sigue
El tercer juicio por la Subzona 14 que se inició a principios del año pasado ingresa en su parte final. Este mes y en marzo también están previstas las indagatorias de dos de los imputados y los alegatos de las partes.
La ronda de testigos ya se agotó en diciembre pasado. Si bien en un primer momento había 140 personas aportadas como testigos, más de veinte no fueron ubicadas o se negaron a declarar nuevamente.
Ahora, en las audiencias que vendrán, se escuchará las indagatorias de dos imputados, el represor Carlos Reinhart y el exmilitar imputado Jorge de Bártolo, y luego en el debate la partes formularán sus alegatos acusatorios y defensivos.
Se fijaron fechas para los días 9, 14, 22 y 23 de marzo y 4, 5, 18 y 25 de abril a las 8.30 horas. Se llevarán adelante en forma presencial en el Aula Magna y por sistema de videoconferencia a través de la plataforma zoom para quienes participen en forma remota, informándose con antelación los datos de conexión.
En el tercer juicio a los represores pampeanos están imputados Luis Baraldini y Carlos Roberto Reinhart, que siguen las audiencias desde prisión domiciliaria en forma virtual, y el militar Jorge de Bártolo, uno de los jefes del Regimiento de Toay en la época de la dictadura, quién está sentado en el banquillo de los acusados por primera vez.
En un principio eran seis los acusados. Pero no llegaron al final del juicio por fallecimiento el militar Gerardo José Jáuregui, el policía Humberto Riffaldi y el exmilitar y condenado Nestor Greppi. El policía Roberto Fiorucci no fue imputado -a pesar de estar procesado- por su delicado estado de salud.
El juicio comenzó en abril de este año. La acusación está a cargo del fiscal general Miguel Palazzani y de la fiscala general subrogante ante el tribunal pampeano Iara Silvestre. El tribunal lo integran los jueces José Triputti, Pablo Díaz Lacava y Marcos Aguerrido.
En este juicio se incluyeron por primera vez en los juicios a los represores pampeanos un delito de índole sexual. Hay dos casos de secuestro y abuso sexual deshonesto con acceso carnal. Se ventilan 197 casos de víctimas en este tercer juicio. La mayoría ya fueron incluidas en los dos juicios anteriores, pero en este debate se agregaron más acusados a los que se les atribuye participación en esos hechos. Del total de víctimas, 72 ya fallecieron. Por otra parte, 11 son las víctimas nuevas, personas secuestradas en forma ilegal durante la dictadura que por primera vez obtendrán justicia.
