La Pampa

"Esto muestra que hay intereses inmobiliarios sobre el acuífero"

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El exintendente santarroseño, Leandro Altolaguirre, salió al cruce de las declaraciones del empresario Jorge O''Reilly, interesado en la urbanización de la ruta 5. "No le importan los conflictos ambientales, que ha tenido varios, porque asienta sus proyectos al lado de cursos de agua", dijo.

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EL DIARIO digital

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Jorge O''''Reilly brindó una entrevista a El Diario en la que defendió su proyecto de una futura urbanización sobre 177 hectáreas ubicadas en la actual zona de seguridad y recarga del acuífero Toay-Santa Rosa-Anguil-Catriló.

Altolaguirre, geólogo y que hizo una tesis de grado sobre el acuífero santarroseño, remarcó que hay que sacar el tema del acuífero de la pulseada política.

"Lo del acuífero es un tema clave para Santa Rosa. Es darle agua de calidad para la capital, tiene que ver con su futuro y su desarrollo", remarcó.

También recordó que la restricción sobre la zona de recarga del acuífero viene del año 1980. "Apenas se instaló el frigorífico, que busca agua de calidad y abundante, se puso la restricción", dijo. Ya había varios proyectos industriales para asentar sobre la ruta 5.

Altolaguirre sostuvo que "O''''Reilly es "un desarrollador inmobiliario. Busca un negocio, lo que en sí mismo no es reprochable. Ha tenido conflictos ambientales en todo el país por esos proyectos. Y es porque los asienta al lado de cursos de agua, canales y arroyos, para fuentes de agua importantes".

"Lo que acá se busca, aunque no hay agua superficial, es asegurarse agua de buena calidad", remarcó. Y añadió: "una vez que la zona está loteada y se construye, es difícil que se haga un control. Acá el poder de policía del APA no se ejerce. Es difícil imaginar que entren a las viviendas a controlar la bomba que está instalada", avisó el exjefe comunal.

Agua buena

En otro tramo de sus declaraciones, Altolaguirre advirtió que "lo que determinan los estudios es que no hay que interferir en el acuífero".

"Es la única zona de agua buena. En el resto de Santa Rosa hay agua muy salinizada (en el centro) y agua con arsénico (al norte de las vías). Quien hace un pozo en la actualidad obtiene agua, que no es pasa consumo", dijo.

"Por eso el agua debe cuidarse. La zona de recarga no debe interferirse, porque es una zona medanosa que permite que se filtre y haya agua de calidad para consumo", remarcó.

También indicó que el Acueducto del Río Colorado fue pensado y diseñado como un complemento para el Plan Director de agua de Santa Rosa. "El agua del acueducto es un complemento. Hoy si querés, se puede decir que ''''sobra'''' agua, pero cuando se llegue con el Acueducto a Pico, al norte provincial, es fundamental el agua del acuífero", detalló.

En cuanto a los asentamientos actuales sobre el acuífero, Altolaguirre dijo que "están en las excepciones. Son actividades de baja incidencia, previstas. Pero desde hace muchos años, desde los años ''''80, no se permite la urbanización".

Y apuntó a las propias declaraciones del intendente Luciano di Nápoli, quien admitió que se evalúa el proyecto de O''''Reilly (una urbanización de 177 hectáreas) y que hay que pensar en permitir algún tipo de urbanización. "Hay que cumplir con el Plan Director, como está, que no permite avanzar sobre la zona de seguridad del acuífero", repitió el actual dirigente radical.

Nombre y apellido

Altolaguirre, además, recordó la postura de la Secretaría de Recursos Hídricos cuando en el año 2017 le remitió una nota al Concejo Deliberante en la que señaló que el acuífero Toay-Santa Rosa-Anguil-Catriló "tiene un largo de 84 kilómetros y un ancho promedio de 10 kilómetros".

"Es uno de los recursos estratégicos juntos a otros acuíferos provincial como el de Valle Argentino, Meauco, Valle de Chapalcó, La Puma-Trilí, Pico-Dorila y Speluzzi", especificó el exintendente.

En la actual zona de seguridad del acuífero de Santa Rosa hay pozos que abastecen de agua potable a la capital pampeana. Una urbanización lo afectaría.

"Sin esa interferencia es muy complejo: hay que establecer las horas en que se succiona el agua, no accederse porque lo perjudica. Si le ponemos una urbanización, lo destruiría", advirtió Altolaguirre.

Luego remarcó que esto "no debe tener un abordaje político" y le puso nombre y apellido de los interesados en el negocio inmobiliario. "Esto si se cambia beneficia a (Colores) Mac Allister, a (Miguel) Solé, a Evangelista. No es una cuestión de que se pone palos en la rueda", afirmó.

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