Entre Pocillos

Entre Pocillos: La interna sin techo

En la Seccion "Entre Pocillos", el popularísimo vecino santarroseño y su mozo predilecto charlaron de todo en la confitería por la que pasa todos los días: el futbol, la interna del PJ y los "faltazos" del Colo Mac Allister en la Cámara de Diputados.

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EL DIARIO digital

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Beto Desuque: - Buenas, buenas, buenas... ¿Qué tal, qué tal, qué tal? ¿Cómo anda la barra, qué se cuenta por acá?

Mesero: - Hoooola, Betito querido y del alma. ¡Salú porá!

Beto Desuque: - Cortala. No acepto cargadas con el tema del Capiatá... y mucho menos de vos, que sos bosterito como yo. Cortala.

Mesero: - Bueno, Betito... no te pongas así... en el partido de revancha lo damos vuelta, vas a ver...

Beto Desuque: - Ponele. Pero nadie tiene la vaca atada. Sabelo.

Mesero: - Te miro fijo y me doy cuenta de que no hablás de fútbol, sino de política...

Beto Desuque: - Insisto: ponele. Sos un vivo bárbaro. ¡Mirá que me voy a poner a hablar de fútbol en la semana en que perdemos con Capiatá! Mejor hablar de política...

Mesero: - Donde, además, la semana fue picante.

Beto Desuque: - Sí... más que la semana lo que se va a poner picante es el añito que se viene. ¡Mamma mía que se están dando con un caño los compañeros!

Mesero: - Yo no lo tenía al Ningo en una posición tan belicosa, ¿eh? Te lo digo sinceramente...

Beto Desuque: - Ni él se debía tener. Pero bueno... así son las cosas... Se ve que las cosas no daban para más...

Mesero: - La gran pregunta es cómo sigue todo este asunto...

Beto Desuque: - Mirá, si me preguntabas hace una semana te hubiera dicho que el final es el de siempre: se pelean para la gilada, pegan gritos como los gatos que se reproducen, y después terminan arreglando... Pero con todo esto que pasó... ay, ay, ay...

Mesero: - Decís que no va a haber luna de miel.

Beto Desuque: - Puede haber una luna de miel, como la hay cada tanto, en ese matrimonio por conveniencia que han hecho Marín y Verna. Pero me parece que el Ningo ya está en otra. Se metieron con Varela y es como si le hubieran tocado un tesoro. Pateó el tablero y no le veo un tono muy conciliador que digamos...

Mesero: - Es que, por lo menos, a Verna le dijo de todo.

Beto Desuque: - Ya lo creo. Tanto que esta vez Verna no puede hacerse mucho el distraído, ¿no? Porque le dio como para que tenga.

Mesero: - Y sin embargo, el tipo sigue impertérrito.

Beto Desuque: - Claro. Mandó a los que tiene cerca para que reaccionen, a Borthiry, a Carmen Bertone... ¡y hasta a Marín!

Mesero: - Epa. ¿Cómo vas a decir que a Marín lo manda Verna, che? No seas irrespetuoso con el Tío...

Beto Desuque: - Ponele. Es un modo de decir. Pero la verdad que un poco me extrañó cómo salió Marín a pegarle al Ningo como si hubiera hablado de él... yo entiendo que hay un pacto entre los viejos caciques y todo eso, pero taaaaanto como para que Marín se exponga de ese modo...

Mesero: - Pase lo que pase, vamos a decir la verdad: ¡qué divertidas que son las internas peronistas, eh! Por lo menos uno tiene la sensación de que pasan cosas, hay pirotecnia de la buena, se dicen algunas frases picantes...

Beto Desuque: - Ponele. Pero en este momento se ve que están todos tan nerviosos que se acusan justamente de eso: de nerviosos. Je.

Mesero: - Y siempre con la razón que le cabe a Marín cuando dice que nadie es Teresa de Calcuta...

Beto Desuque: - Claaaaaaroo... ¡mirá si Marín lo sabrá! Pero no, nadie es Teresa de Calcuta. Ni Marín, ni Verna, ni Ningo, ni ningún otro... A Teresa de Calcuta, tal como está la interna, la usan solamente para las rimas...

Mesero: - ¿Y qué es eso de que el Ningo además anticipó que en la semana va a dar nuevas definiciones?

Beto Desuque: - Sí, sí. Es parte del asunto, parece. Algunos le dicen que suena a amenaza, pero él no se anduvo con medias tintas. Anunció que va a dar datos del petróleo y del Megaestadio. Yo si fuera Verna tendría un poco de miedito, pero viste cómo son estas cosas... después resulta que es todo un “bluff”.

Mesero: - ¿Vos decís?

Beto Desuque: - Yo no digo. Yo espero.

Mesero: - Lo que está claro a esta altura es que el Megaestadio no va ni para atrás, ¿no?

Beto Desuque: - Y no. Entre una empresa a la que adjudicaron ilegalmente, que no tenía experiencia, un proyecto que no existe, los desastres que se hicieron, un ministro que no movió nada... ¿¡qué querés que te diga?!

Mesero: - Qué increíble que esa mole vaya a quedar así.

Beto Desuque: - A no ser que a Larry se le ocurra tener en Santa Rosa una base de lanzamiento de cohetes. Ponele. O que Miguel García tenga alguna idea para vincular al Megaestadio con el Molino, el Mercado Central, el tren y la Radio Municipal...

Mesero: - ¿No estás mezclando muchas cosas, Beto?

Beto Desuque: - Ponele. Pero las cosas están mezcladas de antes. Lo que te digo es que la pelea interna tiene menos techo que el Megaestadio. O sea: esto sigue. Es capaz de saltar al espacio como el ARSAT 1.

Mesero: - Jajajaja. No podías dejar de hablar del tema.

Beto Desuque: - ¿Te lo imaginás al Barba como una especie de astronauta, lanzando su candidatura desde el Megaestadio?

Mesero: - Faaaaa... es buena esa...

Beto Desuque: - Pero del otro lado estará el monumento al Ningo.

Mesero: - ¿Qué monumento?

Beto Desuque: - Y bueno... Federico Ortiz, el intendente de Riglos, dijo que hay que hacerle un monumento al Ningo por su honestidad, su dignidad, su hombría...

Mesero: - Ah, buá...

Beto Desuque: - Por mí que lo hagan, pero les doy dos consejitos: 1) que no tenga techo, como el Megaestadio; 2) que no lo hagan en tamaño natural, porque no se va a ver...

Mesero: - Jajaja. Che, ¿y la oposición en qué anda?

Beto Desuque: - No sé. Pero supongo que el Colorado debe estar en campaña.

Mesero: - ¿Por?

Beto Desuque: - Y... si no va nunca a las sesiones. Por algo faltará a la Cámara de Diputados. Así que supongo que es por hacer política.

Mesero: - Pero ¡cómo faltan, eh! Ya es cualquier cosa...

Beto Desuque: - Ahí sí que aplican el “ultragarantismo” que los senadores Sanz y Pichetto le reprocharon a Miguel Palazzani...

Mesero: - Ja. Ponele, como decís vos.

Beto Desuque: - Pero lo del Colo es entendible, después de todo.

Mesero: - ¿Qué decís?

Beto Desuque: - Lo de los faltazos. Encima que siempre lo han acusado de “rata”, ahora se hace la rata...

Mesero: - Ja. Y sí. Pero ¿por qué es entendible?

Beto Desuque: - Porque como dijo un comentarista de El Diario, en la página web, es algo que le viene de hace tiempo...

Mesero: - ¿Cómo, en qué sentido?

Beto Desuque: - Y... de cuando era futbolista. Ya en Boca tenía varias faltas por partido...

(La ironía final del popularísimo vecino santarroseño, durante la charla dominical con su mozo predilecto, en el céntrico bar-restaurante que visita todos los días para beberse un cafecito y meterse con el fútbol, la política, la actualidad y lo que venga).

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