El Diario Electrónico

Giro inesperado: Bolivia vuelve a tenderle la mano a Israel y recompone relaciones diplomáticas

Escuchá esta nota

EL DIARIO digital

minutos

El nuevo gobierno de Rodrigo Paz acelera un viraje histórico en política exterior y retoma vínculos con Israel y Estados Unidos.

Bolivia se mueve rápido en el tablero internacional y ya dejó atrás la línea dura de los últimos años: tras dos temporadas de ruptura, La Paz y Tel Aviv volverán a tener relaciones diplomáticas. El anuncio llegó desde la cuenta oficial del Estado de Israel en X, donde se informó que el director general del Ministerio de Relaciones Exteriores, Eden Bar Tal, se reunió este martes con el flamante presidente boliviano, Rodrigo Paz, para acordar el restablecimiento del vínculo.

"Una emocionante nueva era para Bolivia, para las relaciones entre Israel y Bolivia y para el mundo libre", celebró Bar Tal, acompañando la frase con una foto junto al mandatario. Según trascendió, Paz también mantuvo un encuentro con una comitiva israelí el mismo día de su asunción en el Palacio de Gobierno.

La decisión marca un quiebre con la postura del gobierno anterior. En octubre de 2023, el entonces presidente Luis Arce había ordenado cortar relaciones con Israel tras denunciar una "ofensiva militar agresiva y desproporcionada" en Gaza. En aquel comunicado, la Cancillería boliviana exigió frenar los ataques y habilitar la entrada de ayuda humanitaria, acusando violaciones al Derecho Internacional y al Derecho Internacional Humanitario.

El contexto de aquel conflicto cambió parcialmente en octubre pasado, cuando Israel y Hamás sellaron un acuerdo de alto el fuego en Egipto. Según EFE, el pacto transita "una frágil primera fase", con rehenes liberados, ataques intermitentes y un futuro incierto.

Pero el giro boliviano no responde solo a ese escenario: forma parte de la nueva estrategia exterior del gobierno de Paz, que también impulsa la reposición de embajadores con Estados Unidos, tras más de una década sin representación diplomática desde la expulsión del embajador norteamericano en 2008.

Paz asumió la presidencia el sábado, luego de imponerse en el balotaje del 19 de octubre frente al expresidente Jorge Quiroga con el 54,96% de los votos. Desde la campaña viene insistiendo en una diplomacia abierta, orientada a recuperar relaciones, atraer inversiones y mover la aguja del comercio exterior bajo el lema: "Llevar Bolivia al mundo y traer el mundo a Bolivia".

El cambio no es menor: durante los últimos 20 años, bajo los mandatos de Evo Morales y Luis Arce, Bolivia mantuvo una postura crítica hacia Washington y Tel Aviv, privilegiando alianzas con China, Rusia, Irán, Cuba y Venezuela, además del reciente ingreso al bloque BRICS.

Ahora, el nuevo mapa diplomático comienza a reconfigurarse. Paz ya recibió al ministro alemán de Relaciones Exteriores, Johann Wadephul, interesado en la industrialización del litio, y abrió el diálogo con delegaciones que acompañaron su asunción.

El canciller Fernando Aramayo resumió la nueva lógica sin rodeos:

"Tenemos que ser pragmáticos en la perspectiva de trabajar en favor de los intereses de Bolivia. Anclarnos en posicionamientos y dogmas, que son simbólicos, impide la posibilidad de avanzar".

Un mensaje claro: Bolivia gira, y lo hace sin mirar por el espejo retrovisor.

Ver más:
También te puede interesar...