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EL DIARIO digital
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Los bombardeos dejaron además siete heridos y provocaron daños materiales en varias localidades. Beirut denunció la violación del alto el fuego vigente desde 2024.
Al menos dos personas murieron este lunes en el sur del Líbano tras una serie de bombardeos ejecutados por el Ejército de Israel. Los ataques, confirmados tanto por fuentes israelíes como libanesas, causaron además siete heridos y serios daños en viviendas y comercios de la región.
Según el Ministerio de Sanidad libanés, una de las víctimas falleció en Charkiyé, cerca de Nabatiye, cuando un vehículo fue alcanzado por un misil. La segunda muerte ocurrió en Aita al Shaab, en el distrito de Bint Yebeil, de acuerdo con la Agencia Nacional de Noticias (NNA). Las autoridades locales no descartan que el número de víctimas aumente en las próximas horas.
Por su parte, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) aseguraron que los ataques estaban dirigidos contra integrantes de Hezbollah, y confirmaron la muerte de dos de sus miembros. Entre ellos, Mohammad Ali Hadid, comandante de la Fuerza Radwan, una unidad de élite de la organización. En un comunicado, el Ejército israelí sostuvo que Hadid "participaba en numerosos planes terroristas contra territorio del Estado de Israel" y que "recientemente había intentado restituir la infraestructura terrorista de Hezbollah".
El segundo integrante del grupo fue abatido también en Aita al Shaab, "mientras intentaba recopilar información sobre las fuerzas israelíes en la zona", indicaron desde Tel Aviv.
Fuentes libanesas reportaron que uno de los bombardeos impactó una motocicleta y otro alcanzó un automóvil en Doueir, dejando un muerto y siete heridos. La explosión provocó un incendio que afectó a varios vehículos, un centro comercial y viviendas cercanas, según el Centro de Operaciones de Emergencia del Ministerio de Salud Pública.
El ataque se produce en un contexto de creciente tensión en la frontera. Desde noviembre de 2024, Israel y Hezbollah mantienen un acuerdo de alto el fuego alcanzado tras más de un año de enfrentamientos posteriores a los ataques del 7 de octubre de 2023. Sin embargo, los incidentes armados se repiten de manera intermitente.
El gobierno israelí sostiene que sus operaciones no violan el pacto, al considerarlas medidas defensivas contra objetivos de Hezbollah. En cambio, Beirut y la organización chiita denuncian violaciones reiteradas al alto el fuego, con el respaldo de Naciones Unidas.
Los episodios de este lunes se suman a otros recientes. La semana pasada, una fuerza israelí cruzó la línea de demarcación y atacó el ayuntamiento de Blida, donde murió un empleado municipal. Beirut y Hezbollah reclaman el retiro total de las tropas israelíes del sur del Líbano, donde Tel Aviv mantiene aún cinco puestos militares pese a los compromisos del acuerdo.