Pablo Solari muy cerca de cumplir su sueño

El volante de Colo Colo Pablo César Solari, con pasado en el fútbol pampeano, puede convertirse en las próximas hora en el cuarto refuerzo de River Plate tras la oferta de 4 millones de dólares por el 60 por ciento del pase que presentó la institución "millonaria".

Solari, quien enfrentó a River en los partidos de fase de grupo de la Copa Libertadores de América, aceptó la propuesta de Marcelo Gallardo y hoy estaría viajando a Buenos Aires para realizar la revisión médica y firmar su contrato.

Además, la dirigencia lo anotará en estas horas antes del cierre del libro de pases para que no ocupe el cupo que deja libre Enzo Fernández, vendido al Benfica y, por el cual River podrá sumar otro jugador hasta el 7 de agosto.

Solari, que nació en la Argentina, en San Luis, y jugó en Talleres de Córdoba, donde estuvo en el banco de suplentes pero no llegó a debutar, hizo su carrera en Colo Colo, al que salvó del descenso con un gol sobre la hora que lo convirtió en ídolo.

Fanático de River, sus padres le pusieron Pablo Cesar por Aimar, el jugador que nació en San Luis y tiene 22 años lleva tres temporadas en Colo Colo, donde jugó 71 partidos, anotó 16 goles y dio 11 asistencias.

Solari se sumaría a Lucas Beltrán, Rodrigo Aliendro y Miguel Ángel Borja, quienes ya acordaron su llegada al conjunto que conduce el "Muñeco" Marcelo Gallardo.

Su paso por La Pampa

El delantero nacido en San Luis tuvo un paso por las categorías formativas de distintos clubes de La Pampa ya que disputó un torneo en El Recreo de Santa Rosa y jugó en las categorías menores de Rumbo a Vélez.

Sus primeros pasos en el fútbol los dio en el Club Deportivo Arizona, de su localidad natal. A los 13 años su padre lo llevó a la escuela Rumbo a Vélez de Eduardo Palacios, ubicada en General Pico.

"Se lo llevé a los 7 años. De chiquito Pablo jugaba en el 'Rojo', el único equipo del pueblo, el club social y deportivo Arizona. Acá somos poquitos y no hay liga, así que lo llevé en mi vehículo hasta General Pico, que queda a unos 150 kilómetros. Allá estaba la escuela 'Rumbo a Vélez', de Palacios. Así, todos los fines de semana", recuerda Víctor Solari, padre de Pablo y de otros ocho hijos.

A los 14 años estuvo una semana a prueba en River Plate, pero la familia decidió no dejarlo por su corta edad por lo que continuó en la escuela de Palacios.

Fue en el 2014 cuando Sebastián Pait, captador de jugadores de Vélez Sarsfield, lo llevó a prueba a dicho club, en donde no fue considerado. Precisamente en ese año fue campeón de Sexta División de Liga Pampeana con Rumbo a Vélez tras vencer en la final a Ferro de Pico.

"Sí, yo lo capté. Antes de Talleres trabajaba en Vélez y fuimos a hacer una prueba a General Pico, donde estaba "Rumbo a Vélez", y Pablo ya había pasado los filtros de Eduardo Palacios. En 2014 lo llevé a una prueba a Vélez, pero prefirió a Florián Monzón. Después fui a Talleres y lo fichamos", recuerda Pait.

Llegó como centrodelantero, pero su primer entrenador en la séptima división de Talleres, Mario Obulgen, lo convirtió en extremo por su facilidad en el juego por las bandas. En el equipo de reserva de Talleres alternaba entre ambas bandas.