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EL DIARIO digital
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Tras la aprobación del Presupuesto 2026, el gobierno de Javier Milei formalizó un fuerte respaldo económico al gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, uno de los aliados estratégicos de la Casa Rosada. Mediante el Decreto 922, la Secretaría de Hacienda autorizó un anticipo financiero de hasta 220.000 millones de pesos para la provincia mesopotámica.
El argumento oficial para este desembolso extraordinario es la imposibilidad transitoria de Entre Ríos para afrontar compromisos urgentes derivados de la ejecución de su presupuesto y la amortización de deudas. En la práctica, este mecanismo —que Milei ha restringido severamente para la mayoría de los distritos— funciona como un "colchón" de liquidez para Frigerio.
Estrategia financiera y "roll-over"
El objetivo del mandatario entrerriano es llegar con las cuentas ordenadas al primer trimestre del año, momento en el que planea salir al mercado internacional para renegociar (rollear) la deuda heredada de la gestión de Gustavo Bordet. "La idea es devolver el anticipo a Nación una vez colocada la deuda, para evitar el pago excesivo de intereses", explicaron desde el entorno del gobernador.
Este flujo de fondos se descontará de la coparticipación federal y deberá ser reintegrado durante el ejercicio fiscal 2026. La medida, sin embargo, despertó críticas inmediatas en el peronismo. El diputado Guillermo Michel cuestionó la gestión de Frigerio tildándola de "imprevisible" y señaló que la administración provincial soluciona sus problemas mediante "más deuda de corto plazo".
Premios y límites de la alianza
El giro de fondos no es un hecho aislado. Entre Ríos cerró el 2025 como una de las provincias más beneficiadas por el reparto de Aportes del Tesoro Nacional (ATN), sumando unos 19 mil millones de pesos. Este trato preferencial responde al rol clave de Frigerio en el Congreso, donde facilitó movimientos que permitieron a La Libertad Avanza consolidarse como primera minoría.
No obstante, la relación mantiene sus matices. Durante la votación en particular del Presupuesto, el bloque entrerriano marcó distancia en temas sensibles, como las leyes de financiamiento universitario y la emergencia en discapacidad, demostrando que el apoyo a Milei tiene límites cuando colisiona con intereses territoriales o sociales de peso.
