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EL DIARIO digital
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La investigación por el brutal triple crimen de Florencio Varela, que conmocionó a todo el país, dio un vuelco clave con la identificación de Tony Janzen Valverde Victoriano, de 20 años y nacionalidad peruana, señalado como el presunto autor intelectual del hecho. El joven, apodado "Pequeño J", sería el líder narco que habría ordenado los asesinatos de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez para "dar un mensaje" a su organización.
A pesar de que su nombre y rostro fueron difundidos públicamente para evitar su huida, un operativo de la Policía Bonaerense en el barrio Zavaleta de la Ciudad de Buenos Aires no logró dar con su paradero. Según el video del procedimiento, los efectivos irrumpieron en un bar y un edificio, señalados como posibles "aguantaderos" del capo narco, pero este ya había escapado.
Cacería internacional y detenciones
La Justicia bonaerense, en conjunto con Interpol, emitió una notificación roja para dar con Matías Agustín Ozorio, de 28 años, la mano derecha de "Pequeño J", acusado de ser coautor de los crímenes. La acusación detalla que los agresores "aumentaron intencionalmente y de manera inhumana el sufrimiento" de las víctimas, propinándoles "múltiples golpes de puño, patadas y diversos cortes con armas blancas". La Fiscalía de Homicidios de La Matanza, a cargo de la causa, sostiene que Ozorio y otros cuatro detenidos estuvieron en la casa donde se cometieron los asesinatos.
Por otra parte, la investigación sumó una nueva pieza al rompecabezas con la detención de Lázaro Víctor Sotacuro en Bolivia. Sotacuro, acusado de ser uno de los choferes que apoyó el traslado de las chicas, fue localizado y arrestado en un hospedaje en la ciudad boliviana de Villazón, tras haber cruzado la frontera desde La Quiaca. Se espera que en las próximas horas sea trasladado a Buenos Aires y entregado a la Justicia.
