Escuchá esta nota
EL DIARIO digital
minutos
El gobierno de Javier Milei buscó presionar a los gobernadores y responsabilizarlos de un posible "descalabro económico" si el Senado aprueba proyectos como la ley de ATN y el impuesto a los combustibles, que actualmente la Nación retiene de forma "ilegal". Sin embargo, la estrategia oficialista, que incluyó un supuesto off the record del ministro de Economía Luis "Toto" Caputo a Alejandro Fantino, terminó por exponer la fragilidad del propio programa económico y se les volvió en contra.
El "pánico" de Fantino
Con el objetivo de advertir sobre las consecuencias fiscales de la aprobación de estos proyectos, Caputo le dio un off the record a Fantino. Según reveló el propio conductor, el ministro le habría alertado que si la economía entraba en déficit fiscal (algo que, en rigor, ya ocurrió en junio según la Oficina de Presupuesto del Congreso), se vería afectada la posibilidad de los argentinos de "irse de vacaciones a Buzios".
Pero el problema surgió cuando, "entusiasmado" con las revelaciones, Fantino describió un panorama de extrema fragilidad económica. Comparó la situación con "una nave espacial con tres reactores" que, en los próximos meses, "empezarán a fallar". El periodista anticipó que "si entra el primer misil y entramos en déficit fiscal", el dólar se disparará, el Banco Central deberá intervenir y el riesgo país superará los 1.200 puntos.
"Sepanlo, se va a mover y mucho, va a ser muy bravo, la vamos a pasar para el orto, va a volar el riesgo país, el dólar se va a ir para arriba de la banda, el Banco Central va a tener que gastar y va a haber ruido en la calle", sentenció Fantino, señalando a "Mandrilandia o los gobernadores enojados" como los responsables de lanzar "los primeros misiles al reactor del superávit fiscal" en la sesión de este jueves.
Al viralizarse estos fragmentos, que dejaron en evidencia una percepción de fragilidad del modelo económico que ya era visible, el Gobierno entró en una fase de "delirio", según el medio. Caputo habló de un video "tergiversado con Inteligencia Artificial", mientras que Milei lo calificó de "opereta".
El Presidente, sin embargo, trazó una línea de defensa distinta a la de su ministro. No alegó adulteración por IA, sino que la edición del clip desvirtuaba el mensaje original. "Han tomado el gusto desde mi mensaje de Davos en hacer cat and paste para que las personas digan cosas que no dicen", argumentó Milei, confundiendo "cat" (gato) con "cut" (cortar), y apoyándose en un post de Fantino donde el periodista sostenía que su intervención completa no era tan catastrófica.
Contradiciendo la percepción de fragilidad, Caputo publicó en X: "La macro está ordenada, y por más que la política trate de generar lío, no va a ser un problema". Sin embargo, la crisis de percepción generada por las declaraciones de Fantino obligó al ministro a dar una nota a Luis Majul, para desmentir en vivo lo que, supuestamente, había dicho en off.
Respuesta de las provincias
Más allá del enredo, el mensaje llegó "clarito" a los gobernadores. Estos no pueden creer que, a horas de una sesión clave en el Senado, el Gobierno no haya intentado un acuerdo y apueste a presionarlos a través de los medios.
En respuesta, las provincias salieron al cruce con el mismo argumento que ya habían planteado en la última reunión en el CFI: si el superávit nacional se pone en jaque al devolver a las provincias los recursos que les corresponden por ley, es porque ese superávit "solamente se sostiene con el esfuerzo y el sacrificio de las provincias", denunció el presidente de la Legislatura cordobesa, Facundo Torres.
Torres se preguntó retóricamente: "¿Dónde queda entonces esa falsa excusa de que las provincias son irresponsables fiscales?". El mensaje desde las provincias es unánime y claro: la que no está ajustando sus cuentas, según ellos, es la Nación.