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EL DIARIO digital
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El reconocido médico urólogo y exmiembro de la Superintendencia de Servicios de Salud de la Nación, Pablo Dédola, ofreció un crudo diagnóstico sobre el colapso del sistema sanitario argentino. El especialista, oriundo de Intendente Alvear, afirmó que el sector privado está en una "crisis terminal" debido al desfinanciamiento que recarga al hospital público.
Dédola fue categórico al señalar que la ecuación económica del sistema privado ya no cierra, principalmente por la falta de recursos genuinos y el cese de subsidios.
"El sistema privado está quebrado, básicamente es un sistema que está totalmente quebrado," sentenció el urólogo en diálogo con Infopico Radio.
Explicó que el sistema se sostenía históricamente por volumen y transferencias de la Superintendencia, un flujo que se ha cortado. "No sale un centavo de la Superintendencia de Salud para lo que son las obras sociales sindicales; el sistema se empezó a resquebrajar y hoy la mayoría no tienen cobertura real", explicó Dédola.
Sobrecarga
La consecuencia directa de esta quiebra en el sector privado es la sobrecarga del sistema estatal. Según Dédola, cuando la obra social sindical no responde, el paciente migra al sistema público, lo que genera un desequilibrio financiero y asistencial.
"El sistema de salud pública termina esponsoreando el otro sistema de salud, y eso no debería pasar," advirtió.
Respecto a La Pampa, Dédola destacó que la provincia funciona como una "isla" donde el Estado es un actor principal eficiente. Sin embargo, respaldó la reciente medida de la provincia de cobrar la atención a pacientes con solvencia económica. "No podés tener gente con un poder económico altísimo sin obra social y que el Estado los atienda gratis. Termina desfinanciando al hospital que debe recuperar esos costos", resaltó.
El especialista apuntó al Programa Médico Obligatorio (PMO) como uno de los principales factores de desestabilización. Dédola criticó a los legisladores por incorporar constantemente prestaciones de alta complejidad (cirugías con láser, tratamientos de fertilidad, nuevas drogas oncológicas) sin prever el financiamiento necesario.
"El programa es tan amplio y ambiguo que desfinancia totalmente el sistema. Hoy tenés coberturas del 100% en oncología, obesidad, cambios de género, etc. Está muy lindo escrito, parece que estamos en Suiza, pero la realidad es que cruje por todos lados. Estamos administrando pobreza".
Para evitar el colapso total, Dédola propuso un "sinceramiento" del sistema a través de tres ejes principales: reducir la cantidad de obras sociales sindicales pequeñas e inviables; adecuar las prestaciones obligatorias a la realidad económica del país; y habilitar planes con distintos niveles de cobertura (similares a los seguros de vehículos) para garantizar la sostenibilidad.
"Suena frío lo que digo, pero el sistema no resiste más parches, es necesario un sinceramiento", concluyó.
