Manifestación en la Plaza: "alzar la voz contra las injusticias"
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EL DIARIO digital
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La docente Ana Contreras, en su momento acusada por plantear en una clase el conflicto de Gaza, destacó la positiva repercusión social que en algunos ámbitos tuvo su caso y consideró que su definitiva absolución significó "un triunfo colectivo".
El rechazo por parte del Superior Tribunal de Justicia de un recurso federal que pretendía motorizar la Fiscalía para llegar a la Corte Suprema de Justicia volvió a darle la razón a la docente, que ahora siente "alivio", según contó tras la decisión judicial.
"Esto no es solo mi 'triunfo', sino que es un triunfo de un montón de personas a las que les importan los derechos humanos y la educación", resumió. Por ahora, la docente sigue sin trabajar frente a estudiantes, porque se abrió un sumario en el Ministerio de Educación, que también tendrá un destino parecido al de la causa judicial.
"Lo que siento es una alegría tremenda, una alegría enorme", añadió Contreras entrevistada en Radio Kermés. Consideró además que "es ineficaz poner recursos públicos para perseguir a una docente por 20 minutos de una clase. Le quita recursos a casos que tal vez lo necesiten más".
Valoró el respaldo que tuvo de parte de la comunidad educativa, organizaciones y sindicatos: "Lo que a mí me llevó a sostener todo esto fue el acompañamiento colectivo. Desde Jujuy a Santa Cruz hubo gente que dijo: 'No condenen esta causa'. Y eso tiene que ver con nuestra idiosincrasia, con una tradición muy nuestra".
Tras todo el proceso, Contreras reflexionó: "Si queda a discusión de la familia qué es un genocidio, qué es un derecho humano o qué es la ESI, creo que se nos van a venir muchos problemas".
También lamentó el espíritu punitivo de buena parte de la ciudadanía: "De antemano se quiere hacer justicia por mano propia contra un docente, como si no existiera la presunción de inocencia".
