Desembarco de Clarín: multas, pase a archivo y un Ejecutivo que debe decidir
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EL DIARIO digital
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Dos hombres fueron condenados por robar y amenazar con un arma de fuego en dos comercios de Santa Rosa. Los hechos ocurrieron en marzo y septiembre de este año. La jueza de control María Elena Grégoire dictó las penas tras un acuerdo de juicio abreviado.
Enrique Alejandro Rocha, de 39 años, recibió tres años de prisión de cumplimiento efectivo, mientras que Maximiliano Nicolás Pintos, de 20 años, fue condenado a un año y seis meses de prisión efectiva. Ambos fueron declarados reincidentes, según lo estableció la magistrada en la sentencia N.º 181/2025, dictada el 20 de octubre.
Dos robos y una huida fallida
Según la investigación fiscal, el 9 de marzo, Rocha ingresó al almacén "La Toscana", ubicado en Autonomista y Juan XXIII, y amenazó con un arma de fuego a dos empleadas, exigiéndoles el dinero de la caja, golosinas y cigarrillos. Se llevó unos 150 mil pesos, pero durante la fuga en una motocicleta Honda Twister chocó con un auto y fue detenido en el lugar por la policía.
Meses después, el 3 de septiembre, el mismo hombre intentó robar otro local comercial en Anza y José Ingenieros, también con un arma. En ese caso, el empleado se resistió y el intento fue frustrado.
En ambas ocasiones, Rocha fue acompañado por Maximiliano Pintos, quien manejaba la motocicleta y lo ayudaba a escapar. Por eso, fue considerado partícipe secundario de los delitos.
Las pruebas y el acuerdo
El fiscal Oscar Cazenave presentó el acuerdo de juicio abreviado, en el que los imputados reconocieron su participación en los hechos y aceptaron las penas. La damnificada Natalia Corredera, dueña de "La Toscana", fue informada sobre el acuerdo y no se opuso.
Entre las pruebas se incorporaron videos de cámaras del CECOM, testimonios de las víctimas, actas de secuestro y el dinero recuperado tras la colisión. Las empleadas del comercio relataron que Rocha apuntó directamente hacia ellas y simuló cargar el arma, lo que les generó un fuerte temor.
La jueza consideró que no era necesario comprobar si el arma podía disparar, ya que su uso como medio de intimidación alcanza para agravar el delito.
Rocha ya tenía una condena previa de un año y seis meses de prisión, por lo que fue declarado reincidente. Pintos también registraba antecedentes penales y se le impuso una pena única unificada con una sentencia anterior.
El fallo dispuso además la restitución del dinero y mercadería a la comerciante afectada, la devolución de objetos personales a los acusados y el decomiso y destrucción de las municiones secuestradas.
