Recuperaron gran parte del dinero robado en la Fundación Maracó

General Pico (Agencia) - Un familiar del hombre detenido por el robo millonario en la Fundación Maracó para la Sanidad Animal (FUMASA), ubicada en la sede de Federación Agraria Argentina (FAA), encontró y entregó a la Justicia gran parte del botín. Son casi seis millones de pesos que el hombre sospechado de ingresar al inmueble había escondido en herramientas de construcción.

Paulo Arriagada, de 36 años y detenido por ser el probable autor del robo, y su pareja de 37 años, que permanece con arresto domiciliario por encubrimiento, decidieron hacer silencio en la indagatoria ante el fiscal Damián Campos, pero en las últimas horas la investigación dio un giro con el hallazgo de gran parte del botín.

Un hermano de Arriagada encontró 5.877.000 pesos escondidos dentro de una hormigonera que se encontraba en el patio de su vivienda, en el barrio El Molino. Según indicaron fuentes de la investigación, el hombre llamó a la Policía luego de advertir que la herramienta de albañilería se encontraba cubierta de manera que él no recordaba, por lo que decidió revisarla y en su interior encontró varios fajos de dinero y prendas de vestir que no le pertenecían.

La Policía secuestró los elementos de interés para la causa, mientras que el familiar del detenido declaró que su hermano había estado en su casa días después del hecho.

El arqueo de caja de la Fundación Maracó había confirmado el faltante de 7.695.581 pesos, por lo que se habría recuperado gran parte del botín y, además, las prendas de vestir que se supone Arriagada utilizó la madrugada del domingo 11 de mayo cuando ingresó a la sede de calle 12 entre 9 y 7, que ahora deberán cotejarse con las imágenes de cámaras de seguridad que tomaron los movimientos previos y posteriores al robo.

Cabe recordar que el hombre y su pareja fueron demorados y formalizados el pasado jueves. El fiscal Damián Campos le imputó a Paulo Arriagada el delito de "robo agravado", por lo que recibió tres semanas de prisión preventiva, mientras que a la mujer la consideró "encubridora" del hecho y le dictaron dos semanas de arresto domiciliario.

Según se reconstruyó en la pesquisa, la noche del robo la pareja abordó un remís en la zona oeste de la ciudad para dirigirse hacia su domicilio de calle 411, pero el hombre descendió en la esquina de calles 5 y 10, a un par de cuadras de la sede de FAA, mientras que su pareja siguió en el automóvil hacia el destino final.

Dos cámaras de seguridad tomaron al sospechoso en cercanías del lugar del hecho, donde ingresó al inmueble y en poco más de dos minutos abrió la caja fuerte con la llave, que sabía dónde se guardaba, y se retiró del lugar. Caminó un par de cuadras y se tomó otro remís en calles 11 entre 14 y 16 para dirigirse hasta su domicilio.