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EL DIARIO digital
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Un anestesista del Hospital Padre Buodo, de General Acha, es investigado tras un procedimiento realizado a un niño de 8 años y que derivó en el traslado del pequeño al Hospital Favaloro, en Santa Rosa, donde está internado en grave estado.
El hospital achense inició esta semana un sumario interno para investigar el accionar de uno de sus anestesistas, tras un procedimiento realizado el pasado sábado 10 de mayo.
Según detalló el portal Telega, el profesional intervino en la atención de un niño de 8 años que había ingresado a la guardia del hospital con una lesión en el brazo.
El menor fue recibido en la guardia por el doctor Marcelo Güemes, quien solicitó la participación de otros profesionales tras evaluar la radiografía de la lesión, que sería una luxación de codo.
El anestesista consideró que se debía aplicar anestesia general para realizar el reacomodamiento del miembro superior afectado. A la madre del niño, quien es enfermera, le pareció un procedimiento un tanto exagerado para una maniobra de rutina, de acuerdo a lo informado por los familiares al portal achense.
Luego de la intervención, todo se transformó en una situación crítica: el niño recibió la anestesia, pero no logró despertar.
El niño fue trasladado al Hospital de Complejidad Creciente "René Favaloro" en Santa Rosa, donde quedó internado. Los médicos no descartan una posible derivación a Buenos Aires para una atención más compleja, mientras la familia atraviesa momentos de angustia y desconcierto.
"La abogada del hospital comenzó automáticamente la actuación sumarial y el profesional fue apartado del servicio mientras se desarrolla la investigación interna", informó el Dr. Gonzalo González, director del Hospital.
En tanto, los médicos no han podido determinar con certeza qué ocurrió durante el procedimiento que llevó al estado actual del pequeño. La madre del niño expresó consternada: "Entré con mi hijo con una fractura y me lo devolvieron casi muerto".
En las últimas horas, el niño logró recuperar cierta lucidez aunque su estado sigue siendo grave y presenta pérdida de visión, lo que agrava aún más el cuadro clínico.
La familia pide el acompañamiento de toda la comunidad a través de cadenas de oración. "Por favor, recen por Mateo, es lo único que nos queda, rezar", expresaron en redes sociales.