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EL DIARIO digital
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General Pico (Agencia) – En la mañana del jueves se realizó en los Tribunales de Pico una nueva audiencia judicial para ampliar la imputación contra Fabricio Borges, el hombre de 48 años que el pasado 29 de junio mató a su ex pareja Raquel Amaya. Al delito de "femicidio", ahora le sumaron "abuso sexual con acceso carnal" luego que la autopsia revelara que la víctima fue violada antes de ser estrangulada.
La audiencia la solicitó el fiscal que investiga el caso, Guillermo Komarofky, y se llevó a cabo ante la jueza de Control Jimena Cardoso. El imputado fue asistido por la defensora oficial Soledad Forte, mientas que también participaron las abogadas Gabriela Labourie y Silvana Abraham en nombre de la Secretaría de la Mujer, que se presentó como querellante en el caso.
Según pudo conocer El Diario, cuando se indagó a Borges se desconocía el informe forense, a cargo del doctor Gustavo Ferreyra, que luego estableció fuertes indicios de un abuso sexual previo al homicidio.
Dos días después de la indagatoria la autopsia confirmó lesiones y marcas en la zona genital de la víctima, que son compatibles con un abuso sexual. También la revisión médica del acusado detectó "rasguños o arañazos" en la zona genital de Borges, además de las lesiones en otras partes del cuerpo que ya dan cuenta de la resistencia de la víctima en el momento del ahorcamiento, luego de ser abusada.
A estas pruebas científicas, se sumaron también algunos testimonios sobre supuestos abusos de Borges hacia la mujer con quien compartía vivienda junto al hijo en común, pero desde hace tiempo estaban separados de hecho.
El fiscal Komarofky solicitó ayer formalmente que, a la figura de "femicidio", se el sume ahora la de "abuso sexual con acceso carnal". La ampliación de los hechos imputados a Borges se da en el marco de nuevas pruebas surgidas en el marco de la investigación, pero no modifican el plazo de la sanción a imponer, ya que el femicidio contempla la pena máxima de prisión perpetua.
La misma audiencia sirvió también para que el fiscal Komarofky solicite diversas medidas de prueba de tipo científicas sobre diversos objetos secuestrados, para determinar los perfiles genéticos de víctima y victimario que, entre otras cuestiones, apuntan a ratificar no solo el lugar donde se cometió el homicidio, sino también los dos lugares donde Borges llevó el cuerpo de su ex pareja.
En cuanto al desarrollo de la investigación, se espera ahora los resultados de las nuevas pruebas técnicas y algunos testimonios, mientras que la Fiscalía optó ya por descartar una cámara gessel con el niño de 8 años, que fue testigo de parte de los hechos. El fiscal Komarofky lo decidió así ante la abundante carga probatoria recolectada contra Borges y para evitar revictimizar al menor, quien hoy vive en el sur con un hermano de la víctima y es asistido por un equipo técnico de atención a la víctima. Si surgieran elementos de valor del contacto del niño con los psicólogos que lo atienden, en ese caso podrían sumarse al expediente.
En los últimos días también se confirmaron los movimientos de Borges posteriores a cometer el homicidio, desde la vivienda donde concretó el femicidio en Monte Nievas hacia la ruta rumbo a Eduardo Castex donde abandonó el cuerpo, y el trayecto desde ese lugar donde recogió el cuerpo y pasó frente a Monte Nievas rumbo a Metileo, para acceder luego al camino de tierra donde finalmente depositó los restos.
Todo ese recorrido, que ya se había reconstruido también con algunos testigos que vieron a Borges en dichas zonas, aunque no el cuerpo de la víctima, se volvió a trazar con los rebotes de las antenas de telefonía que fueron tomando la señal del celular del acusado.
Fabricio Borges continuará detenido hasta la celebración del debate oral en su contra.
