"Hay cuentas pendientes en materia de inclusión"

Se conmemoró este 19 de septiembre el Día Nacional de las Personas Sordas, en recuerdo de la sanción de la Ley 1662 que el año 1885 creaba el Instituto Nacional para Niños Sordomudos. La fecha tiene reconocimiento oficial desde 1958, por iniciativa de la Asociación de Sordomudos de Ayuda Mutua (ASAM).

Además de difundir acerca de este día con el fin de visibilizar la existencia de las personas sordas como integrantes de una minoría lingüístico-cultural, se brindó un curso gratuito de Lengua de Señas Argentina en el Comité Capital de la Unión Cívica Radical. Es todos los sábados a las 17 horas.

"Advertimos que hay mucho trabajo pendiente en materia de inclusión, accesibilidad e igualdad de oportunidades", dijeron desde la organización.

El curso -que comenzó hace un mes, el 19 de agosto- está a cargo de dos profesoras sordas (Natalia Antiman y Dana Sturba), y está destinado a 100 alumnos/as de diversas edades y ocupaciones. La gran cantidad de personas interesadas (hubo 300 inscriptas) "deja en evidencia la falta de este tipo de espacios, los que esperamos comiencen a generarse", dijeron.

Cada sábado, "tenemos la satisfacción de ver el entusiasmo que se genera con las clases". Allí surgen, además, los motivos por los que cada persona se interesó en aprender LSA. En general, se debe a la necesidad de poder comunicarse con personas sordas y comprenderlas en los ámbitos que cada uno se desempeña, ya sea familiar, laboral o educativo.

Conforme lo establece la Ley 27710 sancionada a comienzos de este año, la Lengua de Señas Argentina es una lengua natural que forma parte de la identidad lingüística y la herencia cultural de las personas sordas en la Argentina y garantiza su participación e inclusión plena.

La LSA se transmite en la modalidad visoespacial. Posee una estructura gramatical completa, compleja y distinta del castellano. Al ser visual, es accesible para las personas sordas. A través de ella, la persona sorda puede: comunicarse, transmitir sus deseos e intereses, informarse, defender sus derechos y construir una identidad lingüística y cultural positiva que les permita participar y trascender plenamente en todos los aspectos de la vida social.

"Estamos contentos y esperanzados por poder difundir la comprensión de la LSA y aportar para tener una sociedad más justa", insistieron.