La Pampa

Entre Pocillos: Tercer tiempo

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El popularísimo vecino santarroseño, Beto Desuque, dialogando en la dominical mañana de ayer con su mozo predilecto en el restobar por el que pasa casi todos los días para analizar profundos asuntos o cuestiones al paso.

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EL DIARIO digital

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Beto Desuque: - Buenas, buenas, buenas, bueeeenaasss… ¿Qué tal, qué tal, qué tal? ¿Cómo anda la cosa por acá? ¡Salú, salú a esa barra!

Mesero: - Hoooola, Betito querido y del alma. ¡Por favor cómo te estoy esperando! Mirá: ahí tenés tendida la alfombra roja, así te recibo…

Beto Desuque: - Jajaja. Bueno, bueno… No es para tanto, querido…

Mesero: - ¡¿Cómo que no?! Tenés una semanita hermosa para tu charla… Dejame que te invite lo que quieras… Hoy paga la casa.

Beto Desuque: - Bien ahí. Me parece bienvenido un poco de populismo asistencialista cada tanto. Una pausa en el fanatismo fiscalista.

Mesero: - Apa. Qué definición. Estás para intervenir en la discusión nacional que se ha armado.

Beto Desuque: - Je. Nacional y popular, ponele. Sí, la muchachada se puso de los pelos después de los resultados electorales. Un dramón. Un sainete. Un novelón.

Mesero: - El asunto es cómo terminará…

Beto Desuque: - No termina nunca, querido. Estamos en la Argentina. Quiero decir: antes de la elección creías que no pasaba nada, que era un "amistoso". Bueno, ¡mirá qué amistoso! ¡Mirá qué tercer tiempo!

Mesero: - Pffff… Y no es codificado, sino en vivo para todo el país.

Beto Desuque: - Ponele. Aunque tienen sus códigos. Digo, me parece. Después de las elecciones, el lío de las cartas sobre la mesa. Y mañana y pasado mañana seguirán apareciendo conflictos… Es la vida misma.

Mesero: - Pero nunca un poco de serenidad acá, che…

Beto Desuque: - Si querés puntualidad suiza no es por acá… Je.

Mesero: - ¿Pero cómo la ves? ¿Te parece que el peronismo puede remontar la elección?

Beto Desuque: - Ay, Fabio, si tuviera esa respuesta para el partido por los puntos, en noviembre, supongo que sería un genio millonario, un gurú con la vida solucionada. Antes que eso hay qué preguntarse: ¿a qué peronismo te referís? Je.

Mesero: - Sí, claro, todo muy complejo y combinado.

Beto Desuque: - Más allá del novelón, casi que tipo Pimpinela entre Alberto y Cristina, más allá de las peleas y el show, ahí hay una discusión de fondo sobre el futuro.

Mesero: - Sí, seguro, está clarita.

Beto Desuque: - Y la otra gran diferencia entre peronismos: está lo nacional, con todo ese ruido, que parece casi una guerra, y está lo provincial, donde más vale que no son todos amigos pero por lo menos cuidan las formas.

Mesero: - ¿Vos decís?

Beto Desuque: - Ponele. Más vale que algunos se hicieron los otarios en la PASO, otros se agrandaron demasiado, otros se habrán echado en las reposeras y ahora hay algún fuego cruzado… Pero eso comparado con el despliegue de renuncias, cartas, audios y epítetos que hubo en tierra porteña, es un poroto.

Mesero: - Si vos lo decís…

Beto Desuque: - Igual no te estoy diciendo que en La Pampa el peronismo la da vuelta, ¿eh? Nada que ver. Me parece que bastante jorobada la tiene. Todos repiten lo de 2017. Pero ya lo explica el dicho popular: no todos los días son domingo. Como en el fútbol, sea amistoso o por los puntos.

Mesero: - No se la esperaban, ¿no?

Beto Desuque: - ¡¿Y qué se la van a esperar?! Me parece que no se la esperaban ni Maquieyra y Kroneberger, mirá lo que te digo…

Mesero: - Les cayó una victoria del cielo.

Beto Desuque: - Ponele. Si en campaña hicieron de cuenta que salieron de un repollo que nada tenía que ver con Macri, la verdad es que no creo que se imaginaran semejante victoria. Y bueno: a caballo regalado no se le miran los dientes, ¿no?

Mesero: - En cambio al resto de esa alianza, mamita querida… Qué mal les fue…

Beto Desuque: - Uf. Poco y nada. Casi que salieron a contar el reparto de migajas. Las listas del PRO sacaron un pisito que ya se sabía. Las Mujeres Radicales llegaron poquito y quedaron colas de perro. Y la lista de los popes, ¡ay ay ay!

Mesero: - Pensar que se habían rejuntado todos…

Beto Desuque: - ¿Viste? Eso te hace pensar, ¿no?... Digo, semejante nivel de representación… Un senador nacional, un diputado nacional, el jefe del bloque provincial de diputados, el presidente del partido, las familias tradicionales, las líneas de siempre… ¡¿Todo eso para nada?!

Mesero: - Bueno, no seas tan duro… Tampoco es "para nada"…

Beto Desuque: - Pero te quiero decir: estos sí que pusieron toda la carne en el asador. Nada de amistoso. Se jugaron el pellejo. Y les salió el tiro por la culata.

Mesero: - ¿Vos decís que ya no pueden comandar más a la UCR?

Beto Desuque: - Lo que yo diga no importa, y además esas definiciones tan tremendas no sé si existen, o si duran. Pero me parece que Marino ya tenía todo preparado para hacerse el jefe si ganaba su lista de "unidad". ¿Ahora con qué cara esos dirigentes, que son los mismos de siempre, van a salir a pedirles algo a sus afiliados y supuestos representados? Mal.

Mesero: - Y bueno… Digamos que el radicalismo hace tiempo que viene de derrape en derrape, ¿no? No es de ahora…

Beto Desuque: - Ponele. Más vale. Mirá el regalito que le han hecho al PRO, más puntualmente. En el resto del país la dirigencia de la UCR al menos hace de cuenta que le quieren sacar la jefatura de la alianza al liberalismo y los amarillos… Pero con ejemplos como estos, ¿cómo van a hacer? ¡Se la dejaron servida otra vez a Maquieyra!

Mesero: - Así como lo ves, haciéndose el que no opina de nada, con el Fitito rojo… el tipo se quedó con el queso.

Beto Desuque: - Ponele. ¡Y los votos que sacó en Pico! Ni vive ahí. Pero bueno, corren estos tiempos para la política, ¿no? Mucho márketing, mucha red social, mucho vacío…

Mesero: - Pará un poquito, Beto, no seas tan criticón…

Beto Desuque: - ¡Pero ni critico! Es una descripción nomás… Criticarlo en serio sería decirle mequetrefe, enfermo, ocupa o candidato de Morondanga… Y no, no da…

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