La Pampa

"He tenido situaciones en la que ha corrido riesgo mi vida"

Victor Purreta contó que tiene 18 puñaladas, producto de dos intentos de asesinato dentro de la cárcel.

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EL DIARIO digital

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Texto: Walter Goñi / Fotos: Adrián Pascual / Videos: Juan Pablo Sanso

"He tenido situaciones en la que ha corrido riesgo mi vida", respondió Purreta cuando El Diario le consultó si era verdad que tuvo dos intentos de asesinato en la Colonia Penal. "Sí, 18 llevo ya...", contestó -con una mueca a modo de sonrisa- respecto a las heridas de arma blanca que tiene en el cuerpo.

- Me contaste una parte de la cárcel. Pero también la cárcel tiene otro costado...

- Y, hoy puedo usar estas zapatillas (las muestra sonriendo y levantando las dos piernas), pero cuando entré a la cárcel no las podías usar.

- ¿Tuviste dos intentos de homicidio? ¿Es así?

- A ver... esos dos intentos de homicidios fueron así. Hubo dos situaciones en la que tuvo riesgo mi vida. En mi pabellón son 36, es un lugar de alojamiento para 36 internos. Pero yo no los elijo, no sé ni quién son... entonces no es fácil convivir en una cárcel, y menos con la situación en la que vivimos hoy. Porque vos tenés que convivir con 35 personas más que no conoces. Entonces muchas veces vienen situaciones violentas o ves una injusticia y te metés, porque una de esas (de los intentos de asesinato) fue por una injusticia... y he tenido situaciones en la que ha corrido riesgo mi vida.

- Dos me dijiste... ¿Una cuándo fue?

- De las varias, dos fueron complicadas...

- ¿Cuándo fue la primera, en qué año?

- La primera fue en 2006, en la otra condena anterior, en el pabellón uno bajo. Ahí fue directamente por la espalda. Un muchacho me dijo "no es con vos", y cuando le di la espalda...

- ¿Y la otra fue en 2018?

- Sí.

- ¿Tenés 18 puñaladas en el cuerpo? ¿Es así?

- Sí, 18 llevo ya (sonríe)... por eso te digo, si la cárcel es para una reinserción social no podemos salir lastimados. Puede ser, como se dice, que no por buenos estamos ahí, pero tampoco tendría que pasar lo que pasa.

- ¿Hoy es diferente tu vida ahí en el pabellón sexto alto?

- Sí, hoy es diferente después de tantos años. Mirá, te voy a contar algo... el informe psicológico que a mí me llevó a pedir ayuda fue el informe del Servicio Penitenciario. Y cuando yo empecé a trabajar con el psicólogo particular, que no tenemos la suerte de conseguir, porque cuando conseguimos un psicólogo después lo matan porque atiende a los presos, porque los presos son lo peor que hay... entonces conseguir un psicólogo (particular) para que atienda a los privados de la libertad es muy difícil, yo ya quise conseguirlo antes de la pandemia. Mi psicólogo coincidió con el informe del Servicio Penitenciario, pero dijo algo que es increíble... él dijo "hay que ver si él fue así o él se formó por el lugar en el que vive". En el tema de ser rígido, estructurado, no darle confianza a nadie, la espalda contra la pared. Pero dijo, "podemos hacer un análisis si Purreta es así, o si aplicó su personalidad por el lugar donde vive". O sea, que mi personalidad tiene que ver con el lugar en el que vivo, porque no es fácil darle la espalda a alguien.

- De mi parte no tengo más preguntas. ¿Vos querés hablar de algo, algo que no te haya preguntado, o algo que sientas la necesidad de reafirmar o terminar de contar?

- No, simplemente poder decirte que no sé cuál será la posibilidad de la que se toma como arrepentimiento... porque acá hay una cuestión que por ahí tiene que ver con decir "no, no está arrepentido". Y yo no sé qué tiene que ver con qué otra persona diga que yo estoy arrepentido. Recién te conté varias situaciones en la que te digo, si llorar le hace bien a la persona que quiere ver mi arrepentimiento, yo lloro... pero a mí no me sale. Mi arrepentimiento tiene que ver con mi vida personal, tiene que ver con no cometer devuelta lo que cometí, con preocuparme por mí mismo de no volver a dañar. Y de intentar saber que los errores que cometí se pueden curar, porque hay cura.

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