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EL DIARIO digital
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El juez de Ejecución Penal, Martín Saravia, rechazó este viernes desde la Ciudad Judicial en una audiencia virtual el pedido de salidas transitorias que por segunda vez presentó el asesino de Andrea López, el exboxeador Víctor Purreta. La fiscalía y la querella que representa a Julia Ferreyra, madre de la víctima, se habían opuesto al reclamo.
Con una condena anterior, Purreta enfrenta una condena de 25 años que expira el 18 de septiembre de 2.039. Está detenido en la Colonia Penal 4 y como cumplió más de la mitad de la condena tiene derecho a pedir salidas transitorias. Ya se las rechazaron en 2021. Ahora, los informes del Servicio Penitenciario Federal fueron negativos. El abogado Omar Gebruers, por la querella, se opuso al otorgamiento del beneficio.
La fiscalía adujo que no hay una evolución respecto a la reinserción social. Los informes del SPF por mayoría fueron negativos. "Tiene que seguir trabajando aspectos como la empatía, la postura sexista e ir trabajando otras cuestiones de la personalidad", señalaron.
El psicólogo de Purreta destacó que él se encontraba arrepentido de lo ocurrido y del daño ocasionado. Pero la fiscalia no convalidó esa postura. "Si fuera real ese arrepentimiento nos diría donde está Andrea", retrucaron.
"El arrepentimiento es formal para obtener el beneficio", agregaron. También consideraron una falta total de empatía hacia la familia de la víctima ya que "a casi 20 años de la muerte de Andrea no se sabe donde está".
Purreta está condenado por el homicidio de Andrea López, ocurrido el 9 de febrero de 2004. El cuerpo de Andrea (pareja de Purreta y madre del hijo en común) aún no apareció.
"Acá el impedimento mayor es la personalidad del condenado, las características que impiden que goce del beneficio. Es una persona peligrosa para sí y para los demás. No asume las circunstancias del hecho, tanto es así que no se sabe donde está el cuerpo de Andrea", explicó el abogado Gebruers a El Diario la semana pasada.
"Él no tiene un involucramiento en el hecho, no lo asume, no se hace responsable. No se arrepiente. De hecho, no ha dado señal de donde escondió el cuerpo", prosiguió.
Gebruers representa a Julia Ferreyra, la madre de Andrea. El hijo de Purreta y Andrea López fue clave en el juicio, ya que su testimonio fue una de las principales pruebas del femicidio.
El 9 de octubre de 2014, la Cámara en lo Criminal de Santa Rosa condenó a Purreta a 18 años de prisión al encontrarlo culpable del asesinato de quien fuera su pareja, y madre de su hijo. Lo hizo en función de testimonios y pericias, ya que el cuerpo de la mujer nunca se halló. De hecho, esa fue la principal defensa del ex boxeador para alegar su inocencia.
Andrea Noemí López tenía 25 años cuando fue asesinada por su pareja, el 10 de febrero de 2004. A 19 años del crimen, este año se aumentó la recompensa a 1.500.000 de pesos para quien pueda dar información sobre la localización de sus restos, ya que su familia aún no pudo encontrarla y su agresor jamás confesó detalles de lo sucedido.
Primero Purreta fue condenado en 2005 por el delito de proxenetismo en perjuicio de la joven, pero recién en 2014 recibió una condena a 18 años de prisión por el asesinato de Andrea, cuando el hijo de ambos declaró en la Cámara Gesell lo que vio esa madrugada. Sin embargo, su papá nunca dio detalles de lo que hizo después, y la búsqueda para Julia Ferreyra su mamá y su hijo, sigue vigente.
La búsqueda de Andrea comenzó el 10 de febrero de 2004, cuando la joven de 25 años desapareció en la capital pampeana. Por ese entonces, ella vivía con su hijo de cinco años y su pareja, conocido como "El Lince". Él era boxeador profesional y también manejaba un prostíbulo en Pehuajó, provincia de Buenos Aires. Después se supo que ella no solo era víctima de violencia de género, sino también de explotación sexual, y que él le impedía tener un contacto fluido con su familia.
En la madrugada del crimen, según su declaración ante la Justicia, Purreta discutió con Andrea, luego se durmió y se despertó a las 4 de la mañana. Al despertarse, dijo, ella ya no estaba en el lugar. Hubo testigos que declararon haberlo visto una hora después en su camioneta, y él argumentó que fue porque tuvo que ir a comprar cigarrillos porque ella se los había llevado al irse de la casa.
El 15 de junio de 2005, poco más de un año después del hecho, Purreta fue condenado por "promoción y facilitación de la prostitución" en perjuicio de su pareja, que aún seguía desaparecida. Al momento del femicidio de Andrea López, aun esa figura no existía.
Para dar con su paradero se realizaron diversas búsquedas, también excavaciones y se exhumaron cadáveres, e incluso se tuvo la sospecha que podía haber sido secuestrada por una red de trata de personas.
Dos años después, al cumplir su condena y salir en libertad, Purreta volvió a tener parejas y fue acusado por el mismo delito de proxenetismo con ellas, además de violencia y lesiones.
Fue en 2012 cuando el hijo del boxeador y Andrea, que ya tenía 13 años, dio el testimonio que comprobaría lo que había sucedido con ella: al declarar en Cámara Gesell, dijo que su padre esa noche la golpeó y la ahorcó.
Purreta fue detenido y en 2014 lo condenaron a 18 años de prisión por el asesinato de Andrea Noemí López y la sentencia fue a 25 años al sumarse otros delitos anteriores. Actualmente, él está preso en la Unidad 4 - Colonia Penal de Santa Rosa, donde se volvió a casar dos veces y da clases de boxeo.