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"Solo buenos recuerdos", la foto de Steven Spielberg junto a Ricardo Darín, Peter Lanzani y Santiago Mitre

El director de Argentina, 1985 compartió las imágenes más importantes del Oscar. El after party de la ceremonia oficial.

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EL DIARIO digital

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La noche del domingo dejó un sabor amargo para los argentinos. En el marco de los premios Oscar, la película Argentina, 1985 no pudo alzarse con la estatuilla en la categoría Mejor Película Internacional. La pieza dirigida por Santiago Mitre, y protagonizada por Ricardo Darín y Peter Lanzani, logró innumerables elogios por parte de la crítica, pero no recibió la codiciada estatuilla. Sin embargo, la sola nominación le permitió al equipo detrás de ese largometraje asistir a los Oscar, en el marco de una velada que dejó grandes recuerdos.

Durante las últimas horas del lunes, Mitre recurrió a sus redes sociales para compartir diez postales de lo que significó su paso por los premios Oscar. El realizador de El estudiante escribió en su post la frase "solo buenos recuerdos", para acompañar algunas fotografías en las que se encontraba no solo con los actores de su film, sino también con caras muy famosas de Hollywood. Sin lugar a dudas, la que más sorprendió fue la postal en la que está junto con Steven Spielberg. En otras de las imágenes, se puede apreciar la grabación que hizo del show de Rihanna, y una instantánea con el reconocido director de fotografía Roger Deakins.

Como nació la foto con Spielberg

Durante la previa en la gala de los Oscar, se produjo ese inesperado encuentro. "Estuvimos con Spielberg. Tenemos la foto", comentó Darín cómo ocurrió ese cruce: "No fuimos como moscardones. Cuando Santiago y yo entramos al teatro, él se acercó y se quedó charlando con nosotros. Nos dijo que le encantó la película. Divino estuvo. Me pasó lo mismo que con Cate Blanchett. Nunca te dan la sensación de tan grandes que son, que te están regalando unos segundos. Todo lo contrario, se quedó a charlar con nosotros, meta abrazo, meta palmada".

Con Spielberg, según las palabras de Mitre, hubo un diálogo "amoroso". Pero ninguno de los interlocutores del equipo argentino dejará tanta huella como el belga Lukas Dhont, el director de Close, otra de las películas nominadas este año al Oscar internacional. "Es una película que adoro, bellamente dolorosa. Es uno de esos amigos que te llevás para toda la vida", señaló Darín.

Luego de los Oscar

Una vez finalizada la ceremonia, el equipo de Argentina, 1985 no se mostró abatido ante esa estatuilla que no llegó a ser. "Lo ocurrido aquí en el domingo del Oscar no opaca de ninguna manera el notable recorrido previo que hizo la película este año durante la temporada alta de premios de Hollywood. Todo lo contrario". Lo dijo este sábado el propio Santiago Mitre al conversar con LA NACIÓN sobre cómo vivieron los argentinos las horas previas a la ceremonia. "Haber llegado hasta acá, con el reconocimiento enorme que tuvo la película, nos llena de alegría. Este domingo, suceda lo que suceda, no nos importa. Lo que más nos enorgullece es el recorrido que tuvo la película y la manera en que logró comunicarse con públicos de todo el mundo", dijo el realizador.

Una vez finalizada la ceremonia, Santiago Mitre subió a sus historias de Instagram una foto junto a su mujer, Dolores Fonzi, y el productor Axel Kuschevatzky. Lo curioso fue el gesto que hicieron. Llevaron la mano a la frente y con los dedos formaron una "L". ¿Qué significó eso? Ese gesto remite a la palabra "loser", en inglés, que en español significa "perdedor", por lo que con el posteo admitieron con ingenio ese premio que no fue.

A pesar de que obviamente el mayor deseo era ganar la tercera estatuilla dorada para la Argentina, los productores se tomaron con cierto humor la derrota, y se mostraron felices por todo el camino recorrido.

El after party

El after party de la película Argentina, 1985 fue uno de los más concurridos de la noche de los Oscar, más allá de no consagrarse campeón en su nominación a mejor película internacional. El director del filme, los actores principales y miembros del equipo de producción estuvieron presentes y agradecieron el apoyo de todos los concurrentes. A pesar de la tristeza lógica de no ganar una premiación que tanto se anhelaba, el equipo se mostró muy orgulloso del trabajo realizado y disfrutó de la celebración que se llevó a cabo en el restaurant Tatel, del reconocido tenista español Rafael Nadal, localizado en Beverly Hills. La velada, organizada por Amazon Studios en honor a la película, comenzó a las 20 horas luego de la extensa ceremonia de premiación que duró casi cuatro horas.

La fiesta fue un evento muy emocionante y conmovedor, así como también una oportunidad para que todos los partícipes del filme celebren la creación de una obra cinematográfica que pasará a la historia argentina, más allá de cualquier premiación. A pesar de que ganar la categoría hubiera dado un poco más de notoriedad al filme, la satisfacción por haber logrado que una historia tan importante para nuestro país llegue a la pantalla grande, y quede seleccionada entre las 92 candidatas iniciales, fue lo que realmente se destacó durante la noche.

En diálogo con Teleshow, Ricardo Darín hizo un balance del resultado. "No creo que se trate de una lógica, el trabajo de hacer una película es una cosa, pero promocionarla y darle visibilidad es otra y aparentemente hay otros que hicieron las cosas un poco mejor que nosotros y además Sin novedad en el frente es una gran película, es de alto impacto y ya está, hay que saber ganar y hay que saber perder. No hay lógica, depende de la subjetividad de los votantes y es justo que sea así", expresó el actor.

—¿Cómo viviste el momento cuando se dio a conocer a la película ganadora?

—No me tomó demasiado por sorpresa, sabíamos que eso era lo más probable que sucediera, lo que me confundió es que cuando subieron Antonio y Salma al escenario dije "uy, a lo mejor yo estoy leyendo mal las coordenadas" -pensé-, pero inmediatamente miré hacia un costado (porque todo el equipo de All Quiet on the Western Front estaban sentados al lado nuestro) y vi que el camarógrafo estaba apuntando para ellos y ahí dije "ah bueno, ya está".

—Hay una sensación que puede ser momentánea de desilusión pero con el orgullo de haber cumplido un objetivo

—Yo voy a morir con lo que pienso siempre que es que 'si vos crees que la meca está en un lugar, te olvidás del camino' y nosotros en este camino tuvimos de todo: Golden Globo, Goya, premio del público en todos lados, abrazos, felicitaciones, la gente adoró la película... entonces vos no te podés olvidar del camino porque la verdad que la única meta es el camino, lo demás es una charla, la meta siempre se corre de lugar, '¿qué viene ahora después de...? Lo que pasa es que se supone que después del Oscar no viene nada, y sí, viene que tenés que arrancar de nuevo, hay que ir a laburar (Risas). No estamos tristes, pero a mí sí me entristece que mucha gente se dio mucha manija en Argentina, porque venimos con un tsunami mundialista, y arrancaron con la tercera (haciendo referencia a la tercera estrella y tercer estatuilla), como si fuera un partido más y eso si me da pena, pero también creo que la gente es mucho más inteligente incluso de lo que cree de sí misma y entiende cómo son estas cosas, a veces se gana y otras se pierde.

—¿Vas a poder descansar después de toda esta vorágine?

—Espero, hasta ahora no pude dormir mucho pero sí, espero que sí. Estamos orgullosos y no te digo contentos, porque si venís de perder no estás contento, pero si estamos satisfechos con todo lo que hicimos, con la película que presentamos, con que fue elegida entre las cinco mejores. Estuvimos codo a codo con Lucas (director de Close), una película que adoro porque es bellamente dolorosa, estuvimos en contacto con todos ellos, eso es muy enriquecedor porque te llevas amigos para toda la vida y, hablando de para toda la vida, tenemos una película que va a durar mucho tiempo en la memoria de los argentinos

—¿Se acercó Edward Berger (director y guionista de Sin Novedad en el frente) a saludar a Santiago Mitre?

—No porque, luego de recibir el premio, ya entró en un circuito que es todo por atrás y lo perdés. Pero yo me lo crucé volviendo a la sala en un momento, fui y lo salude y tuvo palabras muy cariñosas conmigo, dijo que le encantaba nuestra película y yo le dije que lo felicitaba por haber ganado y él fue un poco mas allá, a lo mejor por el ímpetu de ganar, y me dijo: "tenemos que hacer una película juntos" y yo le dije: "anda a disfrutar esto ahora tranquilo".

—¿Con quién más te cruzaste en la ceremonia?

—Estuvimos con Steven Spielberg, y ¡tengo la foto con él! Se dio en una charla que entramos con Santiago y después llegó Peter (Lanzani), y él (por Spielberg). Se quedó charlando con nosotros, y nos dijo que había visto la película y le había encantado, lo felicitó a Santiago adelante mio, fue divino y estuvo con nosotros. Me pasó lo mismo que con Kate Blanchet que no te dan la sensación nunca, de tan grandes que son, que te están regalando unos segundos. Y ahí nomás le dije: "Steven tenemos que hacer una película juntos" (bromeó).

Ricardo, cierra la entrevista agradecido de estar acompañado por su esposa Florencia Bas y todo el equipo de Argentina, 1985 que ya los considera parte de su familia y revela una anécdota que compara el resultado de la noche del domingo con el clásico juego del truco. "Yo tenía un médico que había tenido un problema conmigo. No me había atendido bien. Yo había quedado mal, y tuve una reunión con él en su consultorio. Era un hombre muy grande, una eminencia, ¿viste cuando te dicen `una eminencia`? Y después de analizar por qué nos había salido mal lo que habíamos tenido en común, me dice `¿Usted juega al truco, Darín?` Le digo `Sí, juego al truco. ¿Por qué?` `Bueno, ésta es una mano en la que no ligamos nada` (ríe). Y esto (por el Oscar) es una mano en la que no ligamos nada".

Por su parte, Axel Kuschevatzky, productor del filme, también dialogó con Teleshow y se animó a realizar su balance sobre todo lo sucedido con la película argentina. "Yo creo que nosotros cerramos una etapa ayer, no hoy con el Oscar. La etapa de reunirnos y estar tan contentos, felices y orgullosos de la historia que pudimos contar y como la pudimos contar. Hay una cosa muy familiar entre todos nosotros, por ejemplo, Santiago y Ricardo son amigos íntimos, Dolores Fonzi y Florencia Bas también, Peter Lanzani es como mi ahijado, asique es raro ahora pensar en parar la pelota y soltar la película. Fueron cuatro años de nuestras vidas (el tiempo de realización) y seis meses (el tiempo de festivales) muy intensos, complejos y desafiantes, pero ahora tenemos que decirle adiós a la película y, sinceramente, es rara la sensación después de tener un vínculo tan íntimo con un proyecto. Pero gracias por estar presentes y acompañarnos".

"Más allá de cualquier estatuilla, Argentina, 1985 fue la demostración de que el reconocimiento y el éxito no siempre vienen en forma de premios, sino que pueden encontrarse en el camino recorrido y en la satisfacción de haber logrado contar una historia extremadamente relevante que construyó una memoria colectiva para todos los argentinos", completó, emocionado.

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