Fuga laboral

La mañana de ayer en Realicó no fue para cualquiera. Un camión con batea en la Shell de Rutas 35 y 188 desató el pánico: cerrado, con las cortinas puestas y el chofer misteriosamente esfumado.

¡Alerta máxima! La Policía se movilizó de urgencia. Tras el despliegue, el misterio se deshizo como azúcar en agua: el hombre no estaba secuestrado ni en peligro. Simplemente, había decidido que era un buen momento para abandonar el semirremolque y el trabajo por "motivos personales". Un abandono de cabina y empleo en pleno prime time policial. En fin, otro drama laboral que empieza con una "emergencia" y termina con un chofer que dijo: "Me voy, y que otro se ocupe del vehículo".