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EL DIARIO digital
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La hija de María Corina Machado leyó en Oslo un discurso que repasó la destrucción institucional en Venezuela y reivindicó la lucha por la libertad.
María Corina Machado fue distinguida con el Premio Nobel de la Paz en Oslo, pero no pudo asistir por continuar en la clandestinidad. Su hija, Ana Corina Sosa Machado, la representó en la ceremonia y anunció que la dirigente opositora podría llegar a la capital noruega en cuestión de horas, tras salir de Venezuela en una operación sigilosa.
Emocionada, afirmó que espera reencontrarse con su madre esta misma noche y adelantó que Machado "volverá pronto a Venezuela". Acto seguido, leyó el mensaje completo enviado por la líder opositora, quien denunció la corrupción, las violaciones de derechos humanos y la represión ejercida durante décadas por el chavismo.
En el texto, Machado repasó la historia democrática de Venezuela, criticó la manipulación del poder desde 1999 y describió un régimen que, según dijo, "violó la Constitución, falsificó la historia, corrompió a las Fuerzas Armadas, purgó a los jueces independientes, censuró a la prensa y manipuló las elecciones". También habló de la diáspora, de la pobreza extrema y de las persecuciones: "Nos asfixiaron, nos encarcelaron, nos mataron, nos empujaron al exilio", afirmó.
Machado reivindicó las primarias opositoras como un punto de inflexión y sostuvo que la elección presidencial del 28 de julio de 2024 reveló una victoria "abrumadora" del candidato Edmundo González Urrutia. Denunció que el régimen respondió con secuestros, torturas y detenciones masivas: "Crímenes de lesa humanidad documentados por las Naciones Unidas".
El tramo final del discurso apuntó al futuro: "Venezuela volverá a respirar", afirmó, y prometió que el país recuperará la libertad, la democracia y el reencuentro de las familias separadas por el exilio.
La sala del Nobel acompañó con un aplauso sostenido, mientras se espera la llegada de Machado a Oslo para completar un día que ya marcó un punto histórico para la oposición venezolana.
