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EL DIARIO digital
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"Entiendo cómo son las reglas del juego. Pero no creo que sean las formas para alguien que se ha formado en el club. Una persona vino, me comunicó que no iba a seguir al frente del equipo de primera en la Liga Federal, y me dijo que el resto de los dirigentes no quería que siguiera. No fue un día feliz, se han perdido los valores".
Juan Cruz Gavazza grafica en un párrafo resaltado el día en el que finalizó su vínculo como entrenador de All Boys en el proceso profesional, es decir en la Liga Federal, tras la eliminación en el primer cruce con Somisa de San Nicolás y después de haber dominado la fase regular de la zona prácticamente con autoridad.
Es el punto final a un proceso de 8 años. Aunque seguirá en las categorías formativas y con primera a nivel doméstico.
"Uno nunca piensa en el final de las cosas. Si bien por ahora sigo en las formativas, terminar en la parte profesional es difícil. Es una decisión del club de que no continúe con la primera. Entendiendo que son las reglas del juego, pero no son las formas. Me formé en la institución, soy del club, un lugar en el que nos conocemos todos no me parece que haya sido la manera adecuada de terminar", le relata a El Diario.
- ¿Cómo te sentís?
- No es un día feliz, se han perdido los valores. Cuesta. Esto es parte del juego y lo entiendo, pero no son las formas de manejar las cosas. La gente que se ha sumado a la subcomisión de básquet en el último tiempo ha perdido un poco los valores.
- ¿Te dijeron que tenías que irte?
- Una persona que está en la subcomisión me llamó y me dijo que tenía que hablar conmigo. Era para decirme que no iba a seguir en el equipo, que el resto de los dirigentes no quería que siquiera.
- En tu despedida en redes decís que te vas antes de lo esperado.
- Tiene que ver con una cuestión de respeto a alguien del club. Están en su derecho de elegir a quién deseen, pero no fueron frontales. Todo este tiempo se han manejado mal, con promesas que no se cumplieron. En cuanto a jugadores del Pre Federal llegaron a decir que el cuerpo técnico iba a contar con los jugadores que pidiera, pero no pasó nada. Nos perdimos de tener jugadores importantes en el receso.
- Con refuerzos el equipo tal vez hubiese mostrado un potencial diferente. Valentín Duvanced llegó en el final y aportó una cuota de jerarquía, marcó diferencias, pero no alcanzó
- Duvanced estuvo por arriba de lo que necesitábamos, pero rotamos posiciones, hizo un gran trabajo. Nosotros necesitábamos un cinco y él jugó en esa posición a pesar de que era cuatro. Y nos dio una mano enorme. Fue muy profesional.
- ¿Cómo son estos momentos, cuando la cosa está tan fresca? ¿Qué sensaciones tienen tus amigos, jugadores, con los que has llegado a construir una especie de dinastía?
- La primera sensación que tuvieron es la de sorpresa, porque no lo esperaban; y segundo tienen algo de bronca. Bronca por el trabajo de tantos años. No es fácil competir en un torneo profesional con mayoría de chicos del club y nosotros lo hicimos. Me quedan esos vínculos que se han sembrado en este tiempo. He recibido en poquitas horas muestras de cariño de los que pasaron por el club, de padres, madres
- ¿Te deja conforme que en varias temporadas el equipo jugó en un nivel muy alto e incluso pudiste explotar el máximo de cada jugador?
- Sí, porque hemos sido competitivos, jugamos contra grandes equipos en todas las temporadas. También, al margen de eso, los que han pasado por el club representaron el espíritu que significa pertenecer a All Boys. Estamos en un club con demasiado sacrificio para lograr lo que se ha conseguido. Y nosotros lo hicimos con mucho empeño.
- Siempre has hablado del "sentido de pertenencia". ¿Te parece que en esta situación puntual se perdió un poco eso?
- De parte nuestra no, de lo que construimos, no, no hemos cambiado. El sentido de pertenencia que tenemos con el club es muy grande. El punto que nos une cuando ganamos o perdemos es el club y eso no va a cambiar. Quizá pueda cambiar con esta gente que toma decisiones, no lo sé.
- Si te llaman de otro lado ¿estás dispuesto a irte?
- Las puertas están abiertas, no quiere decir que me vaya ya. Si llega alguna oportunidad que me convenga la analizaré y si me conviene la tomaré, pero estoy cómodo en la ciudad como para irme. Tiene que ser algo que valga la pena. Si no seguiré en las formativas, acá, en All Boys, trabajando a pesar de estar con gente que sé que no me quiere.