"Tenemos posibilidades de mejorar"

Franco Román Zalabardo acordó, un poco en silencio para resguardar algunas cuestiones finas, su desembarco en Pico Foot Ball Club. Y fue, para All Boys, un golpe duro porque su crack dejaba de pertenecer al proyecto en Liga Federal. 

"Es una oportunidad que venía esperando. Y se dio cerca de casa", dice Coco, convencido de que el paso a la Liga Argentina no fue en vano. 

Con la mirada retrospectiva latente en su club de toda la vida, y los ojos puestos en este nuevo desafío, el perimetral entiende que las oportunidades hay que aprovecharlas.

Y en este 2022, en el proceso de Pico Football en la Liga Argentina, tras el ascenso, no solo sacó provecho de la oportunidad de jugar, sino que se confirmó como una gran opción ofensiva en la rotación del elenco entrenado por Marcelo Germanetto.

Una prueba es que en el último partido ante Pilar, terminó con 27 puntos, 4 rebotes y 7 asistencias, actuación que despertó una ovación en el Ángel Larrea.

Coco, junto con Agustín Bualó, es una de las apuestas pampeanas dentro del esquema ofensivo del Decano.

Y esa combinación ha funcionado mejor de lo esperado, sobre todo teniendo en cuenta que congeniaron en cancha dos de los jugadores más talentosos de la provincia de los últimos años. Uno desde la conducción, y el otro, desde la responsabilidad de anotar.

- ¿Cómo te has sentido en este salto a la segunda categoría del básquet argentino?

- El hecho de saltar de categoría lo venía esperando hacía un par de años. Se dio cerca de casa y es una oportunidad que no quise desaprovechar.

- ¿Con qué tipo de competencia te has encontrado respecto de la Liga Federal?

- Me encontré con una Liga muy táctica, se juega mucho más rápido que en la Liga Federal, donde se juega más desordenado, a veces es a la carga barraca y lo digo sin desmerecer a nade. En esta competencia se juega más ordenado.

- Antes, en el viejo Torneo Nacional de Ascenso, todo era más "rústico". Se jugaba más físico con jugadores de mucha experiencia. ¿Sentís que eso ha cambiado?

- Se nota un poco el cambio a ese torneo que decís, acá los árbitros dejan jugar un poco más. En el Federal te cruzás con arbitrajes muy sensibles y a cualquier contacto pitan una falta. En esta Liga Argentina la cosa es más permisiva, dejan jugar un poco más y eso le da más dinámica al juego, lo hace más vistoso. En cuanto a los equipos, hay muy buenos jugadores en todas las posiciones y todos tienen grandes quintetos iniciales. Sobresalen algunos clubes con buenas segundas unidades, pero en general hay muy buenos jugadores.

- Pico tuvo una serie de derrotas en el comienzo de la competencia. Se suponía que iba a costar, pero tal vez no tanto. ¿Qué creés que pasó?

- En el arranque los primeros cinco partidos fueron duros, nos tocaron de visitantes y no teníamos pívots. Uno se fue dos días antes y el otro chico, que no era pívot, no estaba habilitado para jugar. Tuvimos tropiezos. Nos tocaron once partidos de visitante, fueron viajes muy largos y jugarlos en esta categoría se nota. La fortuna es que para esas giras más largas, tuvimos el equipo más completo. Fijate que el récord es 6-5 después de estar completos tras el 0-5. La lesión de Axel Mpoyo y Manu Peyronnet, volvió a complicarnos. Leo Rodríguez, que está en Biguá, estuvo a la altura y nos dio una mano importante porque tuvimos recambio debajo del aro.

- En lo personal has tenido una gran temporada, pero lo más importante, has encajado muy bien en la rotación.

- Creo que mantuve una regularidad en la primera etapa. La confianza de parte del cuerpo técnico está, nos incitan a que busquemos buenos tiros y si estamos solos, podemos tirarla. La confianza que me tuve también fue alta… todo ha sumado. Lo más difícil fueron los primeros cinco partidos porque jugué en una posición en la que no estoy tan habituado, tal vez en el Federal sí. Fui ala pívot enfrentando a jugadores con otra talla y se me complicaba. Cuando completamos el plantel y pude salir a jugar al perímetro, cambió la cosa. 

- ¿Lo tomaste como un desafío?

- Era un desafío para mí acoplarme al equipo, porque era el único perimetral que venía de afuera. El perímetro de Pico Football venía del Federal pasado. Lo hice bastante bien y he tenido más de 20 minutos de promedio, en algunos jugué bastante más. Creo que tuve regularidad.

- ¿Sentís que con la llegada de Axel Mpoyo y el cubano Yasmani Fundora se potenció el rendimiento del equipo?

- Totalmente. Ellos conocían este nivel. Yasmani había jugado la temporada pasada en Salta Básket y sabía cómo se jugaba en esta categoría. Y Axel tiene hasta roce internacional, juega en la selección de Ruanda. Viene de un gran nivel y tal vez tiene más recursos que Yasmani, pero juntos nos dieron esa rotación y movilidad que nos hacía falta. Sin ellos parecíamos un equipo de handball, que la pasaba en el perímetro. Con ellos debajo del aro fue más fácil.

- En el último juego ante Pilar fuiste gran figura y la gente te terminó ovacionando, por tu capacidad ofensiva, por tu entrega. ¿Cómo sentís que has caído en el fanático de Pico?

- Las ganas de jugar y ganar siempre son las mismas por más que defienda determinada camiseta. La gente se da cuenta que me entrego. Ellos me conocían de antes y apenas se enteraron de que iba a jugar en Pico -por más que alguna que otra vez me hayan puteado- me brindaron todo su cariño y eso lo valoro. 

- Con dieciséis juegos el equipo se ha afirmado en la categoría. Germanetto decía que el objetivo era afirmarse en este primer año. ¿Qué creés que puede pasar?

- Esta segunda parte se nos va a dar un poco mejor, tenemos posibilidades de mejorar cuando tengamos sanos a Manu (Peyronnet) y a Axel, es clave mejorarlos de sus lesiones. Después tendremos que hacernos fuertes de locales. En esta Liga eso es determinante. De visitante es difícil ganar, pero apostamos a ganar algunos partidos para y tener un lugar en los play in.