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EL DIARIO digital
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En personas mayores de 70 años, la higiene diaria no requiere necesariamente un baño completo todos los días. Lo más importante es mantener una rutina que cuide la piel, evite accidentes y conserve una buena calidad de vida. Por eso, los expertos recomiendan realizar baños completos entre dos y tres veces por semana, complementados con limpieza localizada en las zonas clave.
A medida que avanza la edad, la piel se vuelve más frágil, más seca y con menor capacidad de recuperación. Bañarse con demasiada frecuencia, especialmente con agua caliente o jabones agresivos, puede dañar la barrera cutánea, causar irritaciones o aumentar el riesgo de infecciones. Por eso, es fundamental que cada rutina esté adaptada a las necesidades personales y condiciones físicas.
El agua debe estar tibia, nunca demasiado caliente, y la duración del baño no debe superar los 10 minutos. Usar toallas suaves, evitar frotar la piel y aplicar una crema hidratante inmediatamente después ayuda a conservar la humedad natural del cuerpo. Además, se recomienda el uso de jabones neutros o suaves, adecuados para pieles sensibles.
En los días en que no se realiza un baño completo, es clave mantener la higiene diaria del rostro, las axilas, los pies, las manos y la zona íntima. Esto se puede hacer con paños húmedos o toallas especiales, siempre cuidando la temperatura del ambiente y la privacidad de la persona.
También debe prestarse atención a la seguridad: contar con barras de sujeción, pisos antideslizantes, iluminación adecuada y una silla dentro de la ducha si es necesario. Estos elementos reducen considerablemente el riesgo de caídas, uno de los principales motivos de lesiones en adultos mayores.
Tomar una ducha una o dos horas antes de dormir puede incluso mejorar la calidad del sueño, ya que el contraste térmico ayuda a relajar el cuerpo y preparar el descanso nocturno.
Más allá de la frecuencia, el baño debe ser una experiencia cómoda, segura y placentera, que no solo cumpla con la función de higiene, sino que también brinde bienestar emocional.